“El estado no puede ceder a ningún otro poder social la dirección superior de la enseñanza pública…Gobernar es Educar.” Valentín Letelier Discurso Universidad de Chile, 1888.
Aproximadamente un cuarto de la vida del ser humano se nutre de lo que sus educadores les enseñan. Aprendizaje que nos acompaña toda nuestra existencia.
A todos los que recibieron alguna enseñanza, esta le impulsó a dirigirla
en uno u otro sentido y fue fundamental en su vida…
Todos tenemos un recuerdo grato y agradecido de nuestros maestros.
Es necesario reconocer y dignificar la labor de los maestros, estimulando su perfeccionamiento. Mejorando sus rentas y respetando su estabilidad en el cargo. Así mismo, envolviendo a los maestros en un manto de respeto y gratitud social.
Chile necesita reformar profundamente la enseñanza. Una educación humanista y con un profundo contenido ético. Comenzando tempranamente con salas cunas y jardines infantiles en cada barrio de Chile.
Existiendo y facilitando la educación privada: DEBE DESARROLLARSE
ESPECIAL Y PREFERENTEMENTE LA EDUCACIÓN PÚBLICA. El
Estado debe resguardar una educación equitativa y de excelente calidad para
toda la población, proporcionado los mecanismos para que quienes tienen
problemas económicos puedan tener acceso a ella en todos los niveles
Es indispensable invertir más para educar más y mejor.
En la sociedad existe una intensa y muy prolongada controversia sobre como
cambiar la educación. Las grandes definiciones de La Reforma deben ser
consultadas con profesores y los ciudadanos. Es necesario un amplio acuerdo
social, solo de este modo se constituirá un consenso participativo y también amplio.
El progreso de la humanidad sería inexplicable sin la existencia de los maestros.