Brillante y valiente lo que aclaró al mundo el papa Francisco. “El papa Francisco advirtió hoy de que en la actualidad puede hablarse de una tercera Guerra Mundial combatida “por partes”, azuzada por intereses espurios como la codicia y permitida por una suerte de indiferencia cainita que ya consintió las atrocidades del pasado.” [La Nación.cl]
Un plan, por etapas, movido por intereses egoístas. No habla del brutal ISIS que puede tener 30 mil miembros. Ni de Rusia o China. Se refiere a Occidente en Iraq, Afganistán, Libia, Siria, Irán, Somalia, Ucrania, Venezuela… Una guerra por partes, que es ya la tercera mundial.
Pocos medios han difundido su mensaje. Son parte de esa guerra. Y muchos civiles la han dejado pasar con indiferencia.
Francisco arriesga su vida y pone más distancia con los conservadores que manejan esa religión.
El papa hace lo posible hoy, enseñar desde un cierto aislamiento de la sociedad. Se aparta del pensamiento y deseo masivo imperante, de la propaganda empresarial.
¿Hace lo mismo la izquierda?
No poca prefiere la cautela, no preocupar, ser aceptable para la base social nada amiga de pensar libremente.
Incumple su papel de vanguardia.
En general casi no hay manera de llegar a la masa con los problemas de fondo para la humanidad. Menos ser comprendidos y aceptados. Esa realidad hay que aceptarla. Solo cabe iniciar la semilla de un relato nuevo. A contracorriente.
Lo popular es el acomodo personal y familiar en las posibilidades que ofrece el sistema.
“En el año 2013, los gases de efecto invernadero presentes en la atmósfera subieron a un nivel sin precedentes, sobre todo por el dióxido de carbono (CO2), según mediciones de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), publicadas en su Boletín anual[1] el pasado 9 de septiembre. La red de Vigilancia de la Atmósfera Global de la OMM encontró que en ese año, la concentración de CO2 en la atmósfera alcanzó el 142% del nivel de la era preindustrial (o sea, antes de 1750), el de metano el 253% y el de óxido nitroso el 121%.” [Cubadebate]
“La población mundial golpea con 11 mil millones en 2100 – con un 70% de posibilidades de ascenso continuo.” [BBC]
¿Cuántos analizan lo que sucede en el planeta?
“Las compañías subsidiarias de Avianca Holdings, integrada por nueve aerolíneas, anunciaron hoy que transportaron durante agosto pasado 2.354.364 pasajeros, lo que representa un aumento de 6,6 por ciento frente al mismo período del año pasado.” [Xinhua]
“[…] el petróleo ha regresado. Las señales de su resurgimiento son abundantes. Independientemente de lo que cualquiera pueda pensar, en promedio, los estadounidenses hacen cada día más kilómetros –y no menos– y llenan el depósito de combustible de su vehículo con cada vez más gasolina; evidentemente, cada día menos preocupados por la cuestión. Por ejemplo, el estigma de comprar un vehículo capaz de beberse litros y litros de combustible parece estar desapareciendo; según CNN Money, más o menos uno de cada tres vehículos vendidos hoy es un SUV (todo terreno). Como consecuencia de ello, la necesidad de destilar petróleo ha crecido más que en la China de 2013, algo que sucede por primera vez desde 1999. [Michael Klare]
¿Cuántos están dispuestos a racionalizar sus consumos como exigen las soluciones?
Pocos, entonces ir con la mayoría hace que sea peor el futuro.
La insistente acusación mundial a los gobiernos hoy es el crecimiento económico lento o cero. Incluida la izquierda, aun cuando lo que se requiere es un decrecimiento sostenible.
Lo responsable es asumir ser minoría y proponer un programa socialista consecuente con el estado del medio ambiente. Negarse al populismo fácil.
Partir del convencimiento que incluso la vía del socialismo del siglo 21 no es una solución al colapso de esta civilización.
El papa Francisco se atreve, se adelanta; la izquierda debe hacer lo mismo. Esconderse en la multitud es ir detrás de los magnates transnacionales y su modelo de negocio insostenible.
Por un Movimiento para una civilización sustentable-solidaria
Contacto romulo.pardo@gmail.com