El ejército israelí continuó este domingo la ofensiva contra la franja de Gaza, mientras el primer ministro Benjamin Netanyahu conminó a la población a desalojar los sitios del enclave costero donde, dijo, Hamas realiza su actividad terrorista, ya que son un objetivo para nosotros.
El ejército israelí prosiguió sus intensos bombardeos en Gaza, en los que según Ashraf Qedra, portavoz del Ministerio de Salud en la franja, al menos 15 personas murieron y 30 resultaron heridas. Entre los fallecidos se cuenta Mohammed Ghul, encargado de las transacciones financieras de Hamas.
Un día después de que Israel bombardeó un edificio de 13 plantas con 44 departamentos, en la ciudad sureña de Rafá, hoy atacó un edificio habitacional de cinco pisos en Gaza y otro de siete plantas donde se encontraban las oficinas del Ministerio del Interior de Hamas.
En los ataques aéreos israelíes murieron una mujer y tres de sus hijos en el campo de refugiados de Yabalia, según fuentes médicas.
Las Brigadas Al Qassam (el brazo armado de Hamas), asumieron la responsabilidad del ataque con cohetes contra el cruce de Erez, en el norte de la franja de Gaza, que dejó cuatro soldados israelíes heridos.
Además, cinco proyectiles procedentes de Siria impactaron en los Altos del Golán, horas después de que milicianos de Líbano lanzaron dos cohetes al norte de Israel, según autoridades locales.
Gilad Erman, ministro israelí de Comunicaciones, dijo que su país está más cerca que nunca de desplegar tropas en Gaza. Algunos oficiales mencionaron que las incursiones serían selectivas.
Irán aseguró hoy que derribó un avión no tripulado de Israel que ingresó a su espacio aéreo y sobrevolaba cerca de la planta nuclear de Natanz.