Los asesinatos ocurrieron en zonas del país donde actúan sicarios relacionados con grupos narcos.En lo que va del año, dos reporteros fueron baleados en Concepción y Amambay, sin que hasta el momento las autoridades las hayan podido determinar quienes son los autores de los crímenes y las causas de los sucesos,
El último caso se dio el jueves pasado en Concepción, unos 400 kilómetros al noreste de Asunción, con el asesinato del periodista y abogado Edgar Fernández Fleitas, de 42 años, quien conducía un programa en FM 88.3 Radio Belén Comunicaciones, donde frecuentemente realizaba críticas a las autoridades políticas y judiciales de la zona.
Aproximadamente a las 15.30 del jueves, el comunicador recibió seis disparos de arma de fuego en su oficina, ubicada en un barrio de la ciudad de Concepción, adonde llegaron dos hombres a bordo de una moto, según los primeros informes que recibió la fiscal Dora Irrazábal.
La Policía Nacional informó ayer que detuvo el sábado a un hombre de 23 años, sospechoso de haber asesinado a Fernández Fleitas. El detenido se encuentra a disposición de la Fiscalía.
El Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP) repudió el asesinato del trabajador de prensa y recordó que este crimen se suma al homicidio de otro comunicador ocurrido el 16 de mayo pasado. En esa ocasión, el periodista de AsFausto Gabriel Alcaraz (28), de radio Amambay 570 AM, de la ciudad de Pedro Juan Caballero, unos 450 kilómetros al noreste unción, murió luego de recibir varios disparos de arma de fuego.
La emisora es de propiedad del senador Robert Acevedo, del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), quien anteriormente fue gobernador del departamento de Amambay y cuyo hermano es actual intendente de la ciudad. El legislador también fue víctima de un atentado en abril de 2010, cuando la camioneta en la que viajaba recibió varios disparos de armas de fuego, causando la muerte de su chofer y su custodio, así como heridas al legislador.
Los asesinatos de periodistas se dieron en zonas del país en las que este tipo de crímenes son lamentablemente comunes, con sicarios relacionados con grupos de narcotraficantes que matan por encargo a personas, sin que los casos sean dilucidados por las autoridades. Cada tanto, las autoridades antidrogas descubren inmensas plantaciones de marihuana y laboratorios de procesamiento de este producto.
El gobernador del departamento de Amambay, Pedro González, se reunió días atrás con el presidente Horacio Cartes, a quien le solicitó apoyo financiero para instalar un centro de monitoreo con 200 cámaras de seguridad en las calles de Pedro Juan Caballero, Capitán Bado y Bella Vista, de modo a proveer mayor seguridad a la ciudadanía de la zona.
Asimismo, pidió al mandatario que visite oficialmente la región, algo que no hizo desde que asumió como titular del Poder Ejecutivo, el 15 de agosto de 2013.
En el mejor de los casos, la Policía llega a detener a algún sospechoso de haber disparado contra las personas, pero les es mucho más difícil dar con quienes ordenaron los atentados y conocer las circunstancias de los hechos. Justamente, en la ciudad de Pedro Juan Caballero, fronteriza con la brasileña de Punta Porá, fue asesinado el periodista Santiago Leguizamón el 26 de abril de 1991, convirtiéndose desde ese momento en símbolo de la lucha de los comunicadores paraguayos. Este y otros casos siguen impunes hasta el momento.
/ Página 12 / Ciap-Felap