“Los oponentes del proceso de paz señalan que la economía colombiana ha tenido un buen desempeño pese al conflicto: tiene previsto un crecimiento de 4.6% este año. Inclusive si las Farc se desmovilizan, otros grupos paramilitares seguirán causando problemas. Pero la oportunidad de acabar con medio siglo de muertes, lesiones y destrucción es algo muy valioso. De los dos candidatos, solo el señor Santos puede capitalizar esto”.
La revista, probablemente la más prestigiosa a nivel mundial, indica que la victoria de Santos está lejos de ser un hecho y agrega que ni él ni Óscar Iván Zuluaga han logrado conquistar al electorado.
Sin embargo, ‘The Economist’ señala que los temores que han inculcado en los colombianos de que Santos cederá mucho con las Farc para obtener un acuerdo son exagerados.
“(Santos) ha prometido que cualquier acuerdo será refrendado por los electores. Si a los colombianos no les gusta el acuerdo, tendrán la oportunidad de rechazarlo”.
Sobre Zuluaga, la revista señala que “no es partidario del proceso de paz. Aunque reculó de su promesa de suspender las negociaciones el día que se posesionara, ha puesto una serie de condiciones que parecen estar diseñadas para acabar con el proceso lo más pronto posible”.
El artículo también habla del expresidente y ahora senador electo Álvaro Uribe. “Él nunca ha perdonado a Santos, quien fue su ministro de Defensa y sucesor, por propiciar los diálogos”.
“¿Por qué tanta incertidumbre entonces sobre el tema de la guerra y la paz?”, se pregunta el editorial del ‘The Economist’.
“Una de las razones es que muchos colombianos piensan que el acuerdo de paz no prosperará. Otras negociaciones terminaron inconclusas. No hay garantía que vaya a ser diferente en esta ocasión, pero hay circunstancias más propicias”.
“Las negociaciones están siguiendo una agenda muy estricta, sin la grandielocuencia política de procesos pasados”, agrega la revista.