Un año después del bombardeo de la Maratón de Boston, que ocurrió el 15 de abril de 2013, el periodista estadounidense Russ Baker, del WhoWhatWhy (Quién, Qué, Por qué), reveló en estos días que el FBI pudo estar involucrado con una de las familias emigrantes de origen checheno presentada al público como principal culpable. Esta información, que desafía la narrativa mediática oficial y dominante, fue nominada con otras 236 para la elección de “las 25 noticias más censuradas” del anuario Censored 2014/2015.
Aquel día explotaron dos bombas cerca de la meta del célebre acontecimiento deportivo, murieron tres personas y más de 200 salieron heridas. Cuando el FBI se hizo cargo de la investigación, los hermanos Dzhokhar y Tamerlan Tsarnaev habían sido identificados como los principales sospechosos, a pesar de ciertas inconsistencias de la narrativa oficial de lo que habría sucedido y numerosas preguntas no respondidas. Casi un año después, Baker afirma que el FBI pudo haber estado involucrado con la familia Tsarnaev antes del incidente, cuando la mayoría de las personas que pueden arrojar luz sobre el caso fueron silenciadas y muertas a tiros -Tamerlan Tsarnaev y más tarde, su amigo, Ibragim Todashev-, deportadas -la novia de Todashev- o silenciadas.
Eric Holder, Procurador General de EEUU, anunció el 30 de enero de 2014 que el gobierno va a pedir la pena de muerte en este caso contra Dzhokhar Tsarnaev. Baker pregunta: ¿Es una coincidencia que el gobierno federal ponga en el corredor de la muerte a la única persona que podría ser capaz de revelar la verdad sobre esta tragedia? “Lo mejor que podemos decir como conclusión final es que la historia oficial se extendió a través de filtraciones a medios de comunicación amigos de las autoridades durante las primeras horas y días siguientes al atentado hasta convertirse en la narrativa incuestionable, continuando con una investigación carente de apariencia seria y sin la mente abierta”.
En otras palabras, el WhoWhatWhy y Baker piensan que el episodio de la bomba fue fabricado y los musulmanes chechenos culpables estaban seleccionados como “falsos positivos” mucho antes que los hechos ocurrieran. “Desde la primera semana después de la tragedia hemos estado planteando preguntas sobre la forma en que una historia plagada de improbabilidades, anomalías y signos de interrogación se convirtió rápidamente en un ‘crimen resuelto’ y un hecho más, sin siquiera preguntar si algo podría estar tramando un gobierno que una y otra vez ha mentido a la gente estadounidense”, protestó Baker.
“Debemos tener cuidado con las afirmaciones de que los hermanos [Tsarnaev] deben recibir el apodo omnipresente de “lobos solitarios”, incluso si se demuestra que plantaron las bombas. Esto es especialmente cierto, dadas las interacciones pre-Maratón confirmadas entre la familia Tsarnaev y el gobierno federal (incluyendo sus contactos con el FBI), un tío ligado a la CIA, el interés de la inteligencia rusa, las quejas de los padres de que sus hijos fueron inculpados, y más”, añadió Baker.
“También observamos cómo se estaban silenciando las únicas personas que podían arrojar luz sobre lo que realmente ocurrió, por el destino o por el diseño. En primer lugar, Tamerlan Tsarnaev murió en una lluvia de balas. Entonces, su hermano Dzhokhar casi fue asesinado en un bombardeo masivo de la embarcación en que se escondía sin armas. Luego, un amigo de Tamerlan, Ibragim Todashev, fue asesinado en un tiroteo aún inexplicable porque estaba desarmado y bajo custodia del FBI. Enseguida, a la novia y a los amigos de Todashev se les dijo que dejaran de hablar de lo que había pasado o serían deportados, y luego fueron acosados y, por lo menos en su caso, en realidad deportados”, relató el periodista. “Esto deja sólo a Dzhokhar Tsarnaev para contarnos su historia y la de su hermano y este notable conjunto de eventos en uno de los episodios más extraños, profundos, en la reciente historia de América y el mayor incidente “terrorista” desde el 11 de septiembre, más de una década antes. ¿Dzhokhar podrá alguna vez contar su historia? El anuncio del gobierno que busca la pena de muerte sugiere que desea enterrar el asunto, no en sentido figurado, sino literalmente.
Baker ofrece una relación de varios hechos raros que le ocurrieron mientras hacía la cobertura del incidente. Por ejemplo, el 19 de abril 2013 escribió: “Durante una reunión celebrada el martes [16 de abril] por la mañana, menos de 24 horas después de los atentados en el maratón de Boston, una persona bien intencionada me preguntó si yo pensaba que podríamos suponer que los sospechosos de siempre estaban detrás del tumulto, o no había ‘más de eso’. Cuando expliqué mis dudas sobre la prisa para esa conclusión convencional -y de dónde provenían esas dudas-, me dijo que estaba en un terreno peligroso. Esta persona, al parecer, estaba bastante segura que los culpables debían provenir de ciertos enemigos bien publicitados de EEUU e incluso no quería considerar cualquier cosa más compleja”.
Baker cree que las opciones de Dzhokhar para evitar la pena de muerte son dos: ir a juicio y tratar de vencer a la fuerza colectiva del establecimiento de seguridad de EEUU y a una opinión pública prejuiciada o, simplemente, admitir la culpa y llegar a acuerdo con el fiscal para un castigo menor. “Nos preguntamos si alguna vez se le permitió testificar”, reflexionó el periodista. “Aunque la estrategia de la pena de muerte conduce a una declaración de culpabilidad por un cargo menor, lo más probable es que Tsarnaev nunca salga de la cárcel y podría ser puesto en un aislamiento en el que nunca podría contar su historia, como se ha hecho con el “talibán de América” John Lindh [nunca declarado “combatiente enemigo” y preso por 20 años en California]. Este tratamiento se suele justificar en esas situaciones cuando resulta necesario, ya sea para “proteger” al preso o para evitar que él se comunique con “otros” terroristas, aunque esto último sería exagerar el caso de Tsarnaev, quien ha sido presentando esencialmente como “protagonista solitario”, sólo con su hermano muerto como único colaborador”.
En los seis meses siguientes al bombardeo, el FBI intimidó continua y disciplinadamente a personas, en su mayoría oriundas de Chechenia, que sólo estaban conectadas vagamente con los presuntos terroristas Tsarnaev. Incluso deportó a una y le dio muerte a tiros a otra. Estas personas podrían ayudar a aclarar los métodos del FBI en la contratación de inmigrantes para el trabajo encubierto, y cómo estas prácticas pueden vincularse con relaciones previas entre el FBI con los sospechosos del bombardeo.
Eliminación de testigos molestos
En otro informe suscrito por Dave Lindorff, Russ Baker y Milicent Cranor, el 29 de octubre 2013WhoWhatWhy.com profundizó en la hostilidad del FBI con figuras marginales chechenias, que se inicio con la marcación e interrogatorios a diario del inmigrante Ibragim Todashev y de su compañera, también inmigrante, Tatiana Gruzdeva, por conocer ambos a Tamerlan Tsarnaev, el emigrante de igual origen sindicado como supuesto bombardero. En un interrogatorio en Orlando, Florida, Todashev fue muerto a tiros por un agente del FBI que afirmó que el hombre bajo su custodia lo agredió durante un interrogatorio.
Hassan Shibly, director ejecutivo del capítulo de Florida, del Centro de Relaciones Americano-Islámicas (CAIR), dijo que los agentes del FBI hostigaron e intimidaron a los amigos de Todashev una vez muerto y denunció el posible uso de informantes para controlar sus contactos de prensa, además que siguieron e interrogaron a numerosas personas durante largas horas e incluso encarcelaron a algunas bajo cargos dudosos. Los agentes del gobierno amenazaron a los chechenos con deportarlos si no “cooperaban”, táctica que Shibly piensa puede implicar su reclutamiento como espías del gobierno.
Dos personas abandonaron EEUU para evitar nuevos actos de hostigamiento. Otra fue deportada, mientras una cuarta enfrenta la deportación. Ninguno tiene antecedentes penales. La mayoría de las personas conversaron dos o más veces con Tamerlan Tsarnaev y su hermano menor.
*) Ernesto Carmona, periodista y escritor chileno, jurado internacional de Proyecto Censurado
-Russ Baker, “Does US ‘Death sentence’ in Boston Case Equal Silence?”, Who What Why, February 3,2014,
http://whowhatwhy.com/2014/02/03/does-us-death-sentence-in-boston-case-equal-silence/
-Boston MIT Cop Cover-Up, By Russ Baker on May 23, 2013
-TNYT: 29 de abril 2013, Hombre de Brooklyn rehusa testificar en el caso de la comba de Times Square
Proyecto Censurado: http://www.projectcensored.org/fbi-manipulates-grand-juries-criminalize-activists/
Student Researcher: Carmen Perez (Indian River State College)
Faculty Evaluator: Elliot D. Cohen (Indian River State College)