Anja Niedringhaus, de 48 años, foto-reportera de guerra alemana de la agencia estadounidense Associated Press (AP), murió tiroteada aparentemente por un policía de su custodia el viernes 4 en la zona fronteriza con Pakistán en el este de Afganistán, en vísperas de las elecciones presidenciales del sábado. También fue herida la corresponsal canadiense de AP Kathy Gannon, de 60 años, quien está hospitalizada.
(Todavía no se conocen los resultados de la jornada electoral del sábado, que dejó un balance de 109 muertes en por lo menos 140 atentados, según reportó la agencia afgana de noticias Pajhwok. Los analistas dan por seguro que habrá segunda vuelta el 28 de mayo porque ninguno de los 8 aspirantes alcanzará más del 50% de la votación para suceder a Abd El Hamid Karzai, quien convirtió a Afganistán en un narco-Estado, con la ayuda de Washington, la CIA y la OTAN).
Niedringhaus cubrió guerras en Kuwait, Afganistán, Irak, Libia, los Balcanes, Gaza y Cisjordania durante 20 años. Estuvo frecuentemente en Afganistán desde la invasión de Estados Unidos en 2001.
“Anja y Kathy han pasado años en Afganistán cubriendo el conflicto y a la gente de ahí. Anja era una periodista vibrante, dinámica, muy querida por sus fotografías interesantes, su cálido corazón y su alegría por la vida; estamos desconsolados por su pérdida”, dijo en un comunicado la editora ejecutiva Kathleen Carroll.
Ambas reporteras iban en un convoy de trabajadores electorales desde el centro de Khost al distrito de Tani. Los vehículos estaban protegidos por fuerzas de seguridad afganas y el equipo de AP usaba su propio auto con un traductor freelance.
Mientras esperaban que el convoy se moviera, un comandante se acercó al coche, y gritó “Allahu Akbar” –Dios es grande– y abrió fuego contra el asiento trasero con una AK-47, según el relato del traductor que iba en el asiento delantero.
El agresor fue inmediatamente detenido. El portavoz de los talibanes Zabiulá Muyahid negó cualquier vinculación de su grupo con el asesinato, según la cadena local Arezo.
Anja Niedringhaus trabajaba hace una década con AP y antes laboró 12 años con la European Pressphoto Agency, cubriendo los conflictos balcánicos y la caída de los talibanes en Afganistán.
Kathy Gannon es una de las reporteras más veteranas en Afganistán, adonde llegó a mediados de los años 80 para cubrir la lucha de los muyahidines afganos contra el Ejército soviético. Ahora es corresponsal especial de la agencia estadounidense para Pakistán y Afganistán.
Los periodistas extranjeros se convirtieron en blanco de atentados al acercarse las elecciones del sábado en este país centroasiático invadido y ocupado por Estados Unidos en 2001 y más tarde secundado por la OTAN. En el último mes fueron asesinados tres informadores de medios extranjeros.
El periodista afgano Sardar Ahmad, 40 años, de la agencia francesa AFP, murió el 20 de marzo junto a su mujer y dos de sus tres hijos en un ataque talibán al exclusivo hotel Serena de la capital afgana.
El 11 de marzo, el “Movimiento Fidai Mohaz de Afganistán” reivindicó en Kabul el asesinato del reportero británico-sueco Nils Horner, 51 años, corresponsal itinerante de radio Suecia con asiento en Hong Kong. “Nills Horner no era un periodista, sino que espiaba para el MI6”, sentenció un comunicado del movimiento de reciente fundación. El Talibán negó cualquier relación con este atentado.
Entre 2004 y 2013, en Afganistán murieron asesinados 15 periodistas que trabajaban para medios como BBC, “La Reppublica” o Deutsche Welle, además de periódicos, radios y televisoras locales, según Reporteros sin Fronteras.
Kabul no es seguro para los extranjeros
Un análisis de Pau Miranda, de Efe, señala que el riesgo de ataques a extranjeros existe en Afganistán desde hace décadas, pero en el último año comenzó un éxodo de residentes foráneos a causa el aumento de ataques y secuestros.
Kabul, que hasta hace dos años ofrecía cierta seguridad a la vida cotidiana de numerosos extranjeros residentes, hoy es hostil para una menguante colonia foránea que vive ahora prácticamente enclaustrada, reportó Efe.
La mayoría de los residentes extranjeros pertenece a diferentes nacionalidades. No sólo son europeos o estadounidenses sino también asiáticos y de otros continentes, incluso de América Latina. Gran parte está vinculada a la burocracia de las potencias occidentales que operan en ese país a través de ONGs y agencias nacionales o de organismos internacionales tipo USAID, Fondo Monetario, y empresas privadas contratistas que hacen negocios en el país aún ocupado por tropas de EEUU/OTAN.
El 17 enero hubo un ataque contra un restaurante libanés frecuentado por extranjeros, donde murieron 21 personas, incluidos 13 foráneos, según el reporte oficial, pero los talibanes reivindicaron 37: “29 invasores extranjeros de alto rango y 9 mercenarios afganos”, además de los 3 atacantes. En el hotel Serena, el 20 de marzo oficialmente hubo 13 víctimas, pero los talibanes proclamaron 22 muertes, además de sus 4 atacantes suicidas.
Entre otros atentados, el 28 de marzo talibanes atacaron la casa de huéspedes de la ONG estadounidense Roots of Peace, donde murieron siete personas.
Las elecciones del sábado
Aún no se conocen los resultados de las elecciones presidenciales del sábado, que dejaron un balance de 109 muertos, en al menos 140 ataques en todo el país, según informes de la agencia de noticias Pajhwok.
La Comisión Electoral Independiente (CEI) anunció que los resultados definitivos se darán a conocer en dos o tres semanas. Por ahora, la mayoría de analistas y expertos apuesta que habrá segunda vuelta, prevista para el 28 de mayo, porque dan por altamente probable que ninguno de los ocho candidatos que compitieron para suceder a Abd El Hamid Karzai alcance más del 50% de votos necesarios para evitar el balotaje.
Tres son los candidatos en primera línea para suceder al presidente Karzai, impuesto en diciembre 2001 por Estados Unidos: el ex ministro de finanzas, Ashraf Ghani, y los ex cancilleres, Abdullah Abdullah y Zalmai Rassul.
Karzai se retira después de servir a Estados Unidos como presidente de Afganistán desde el 22 de diciembre de 2001. Fue ratificado “democráticamente” el 7 de diciembre de 2004 y reelegido en agosto de 2009.
Este musulmán moderado de etnia pastún, perteneciente a una familia de gran influencia, fue un puntal político de Estados Unidos, pero en los últimos años abogó por un definitivo retiro de las tropas estadounidenses que aún permanecen en Afganistán.
Según Peter Dale Scott, ex diplomático canadiense y profesor en la Universidad de California, el presidente saliente convirtió a Afganistán en un narco-Estado con el apoyo de Washington, la CIA y la OTAN, de acuerdo a su artículo “El opio, la CIA y la administración Karzai”, publicado en 2010 en la Red Voltaire.
“Para Peter Dale Scott son inútiles los lamentos sobre el desarrollo del cultivo de droga en Afganistán y sobre la epidemia mundial de adicción a la heroína. Lo importante es sacar conclusiones de los hechos ya comprobados: los talibanes habían erradicado el cultivo del opio de amapola y la OTAN favoreció su cultivo. El dinero de la droga corrompió al gobierno afgano de Karzai pero este dinero se encuentra principalmente en Estados Unidos, cuyas instituciones están corruptas. Así que la toma de decisión para solucionar este tráfico no está en Kabul sino en Washington”, escribió la Red Voltaire.
Tras analizar un artículo de Alfred McCoy, en el Tom Dispatch, sobre el mega tráfico de heroína, Peter Dale Scott concluyó:
– El Estado afgano de Hamid Karzai es un narco-Estado corrupto, que obliga a los afganos a pagar sobornos ascendientes a 2.500 millones de dólares al año, cifra equivalente a la cuarta parte de la economía del país.
– La economía afgana es una narco-economía: en 2007, Afganistán produjo 8.200 toneladas de opio, cifra que representa el 53% del PIB nacional y el 93% del tráfico de heroína a nivel mundial.
Pero ésta es otra historia que puede leerse aquí.
*) Ernesto Carmona, periodista y escritor chileno, presidente de la Ciap-Felap.
Fuentes principales:
-Vanguardia
http://www.vanguardia.com.mx/asesinanafotografaalemanaenafganistan-1991230.html
-Red Voltaire
http://www.voltairenet.org/article167879.html
-Tom Dispatch:
http://www.tomdispatch.com/blog/175225/alfred_mccoy_afghanista_as_a_drug_war