En el centro del debate está la derogación de las leyes contra la poligamia en este estado de EE.UU., prohibirla, según muchos, violaría la libertad de religión, pues la bigamia es practicada por miles de mormones fundamentalistas de la zona.
Joe Darger junto a sus tres esposas, Alina, Vicki y Valerie, dos de ellas primas entre sí, son abiertamente mormones fundamentalistas. Entre todos tienen 25 hijos. / AFP
Kody Brown y sus cuatro esposas dieron un salto a la fama después de que decidieran mostrar al mundo su cotidianidad junto a sus 17 hijos en un reality show en la cadena TLC. Los protagonistas de la serie ‘Sister Wives’ tuvieron que mudarse a Las Vegas después de que se iniciara una investigación en su contra por bigamia. Veintidós desayunos cada mañana parecerían un maratón para cualquier persona, sin embargo, la familia vive con normalidad la cotidianidad de contar con cuatro madres y un padre.
Aunque conocían el impacto que tendría su historia en la televisión estadounidense, los Brown estaban lejos de pensar que marcarían la historia de las familias polígamas en Utah, después de que en 2010 instauraran una demanda contra este estado por el proceso legal que emprendió en su contra. La acción puso en el centro del debate la discriminación contra este tipo de familias, pero sobre todo, el dilema sobre si se violaba la primera enmienda de la constitución de EE.UU., la libertad de religión.
Cerca de 38 mil mormones fundamentalistas son polígamos en Utah, según cifras del gobierno de Estados Unidos, aunque es difícil determinar cuantos más adoptan el adulterio como opción de vida. Paradójicamente se trata de uno de los estados donde, hasta diciembre de 2013, se castigaba con más severidad esta práctica.
Como una victoria fue adoptada la decisión del juez Clark Waddoups para aquellos que creen que este tipo de leyes constituyen una intromisión gubernamental al interior de los hogares. El 13 de diciembre de 2013 se favoreció a Kody Brown y sus cuatro mujeres, declarando legal la “cohabitación” y derogando así partes clave de la ley anti-poligamia de Utah.
Pero lo que para Brown es “amor multiplicado”, tal como ha manifestado en repetidas ocasiones ante los medios, para otros es una medida inmoral. Cuenta Hernando Camargo, vocero oficial para Colombia de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (conocidos como mormones por muchos) que aunque la poligamia es un legado de las primeras enseñanzas de esta iglesia, desde 1890 se prohibió dicha práctica, disposición que no fue aceptada por muchos que se convirtieron en fundamentalistas, ubicándose al sur de Utah y Arizona para seguir practicando el matrimonio plural. Desde entonces, señala Camargo, han sido aislados de la comunidad.
“Creemos que la tolerancia llevada a un extremo conduce a que muchas veces lo que es legal no necesariamente esté bien. Este tipo de leyes contribuye a esas cosas, aunque sean aceptadas legalmente, moralmente no son correctas”, subraya Camargo frente al fallo.
Los esposos Darger y sus 25 hijos
Alina y Vicki -primas entre sí- y Valerie son esposas de Joe Darger, una familia polígama con 25 hijos que también forma parte de los mormones fundamentalistas que decidieron llevar este estilo de vida.
“Love Times Three” es el nombre del libro con en el que los Darger decidieron hacer pública su forma de vida, revelando los percances que genera vivir en una familia tan numerosa, pero sobre todo, resaltando las ventajas que para ellos tiene convivir con cuatro esposas y madres, y un padre de familia. Sin embargo, tal como Joe Darger manifestó en entrevista con AFP, revelar que era polígamo no fue fácil. “Cuando lo hice público hace cuatro años ese miedo era muy fuerte (…) este es un delito de tercer grado, supone una pena de prisión grave. Mis abuelos estuvieron presos”, añade.
Fue hace algunos años que la ONU instó a EE.UU. a prohibir tajantemente la poligamia después de que se conociera uno de los casos más mediáticos y polémicos en este país, el de Warren Jeffs.
Jeffs, líder fundamentalista mormón, quien también se adhirió a la práctica de la poligamia fue condenado a cadena perpetua en 2011 después de que su caso escandalizara a EE.UU.
Lo que él calificaba como una revelación de Dios, terminó en la violación de menores de entre 12 y 16 años y en la convivencia con más de 90 mujeres, la mayoría sus madrastras, quienes pasaron a ser sus esposas tras la muerte de su padre.
Esta semana se conoció que el procurador general de Utah buscará apelar la decisión del juez federal y evitar a toda costa la legalidad de la bigamia. Una disputa que seguirá en el ojo del huracán, pero que sin duda, estará impulsada por personajes como los integrantes de la familia Darger, quienes creen, quizá, al igual que uno de los talentos más destacados de la literatura norteamericana, Henry Miller, que “la monogamia es como estar obligado a comer papas fritas todos los días”.