Diciembre 26, 2024

Por torturas piden procesar a Patricio Kellet Oyarzún, jefe de inteligencia militar de Valdivia en 1973

El viernes recién pasado el abogado Roberto Avila Toledo solicitó por escrito a la Corte de Valdivia el procesamiento del ex teniente Patricio Kellet Oyarzún, jefe de la inteligencia militar en la zona al 73, como autor de salvajes torturas que incluyeron electricidad en los dientes, sacar uñas, simulacros de fusilamiento, colgamientos por las extremidades por días enteros etc … en contra del, a la fecha del golpe de estado, Intendente Sandor Arancibia, el alcalde Luis Díaz y la directiva del PS y JS encabezada por Uldaricio Figueroa, Víctor Hormazabal, Rogres Delgado, Joel Asenjo, Leda Santibáñez  y el director de la Radio Camilo Henríquez, el periodista Juan Yilorm.

 

Bajo el acicate del periodista Eduardo Hunter, actual presidente de Renovación Nacional en la zona, que “denunciaba” un fantasioso Plan Z, que incluía desembarco de tropas cubanas y secuestro de los hijos de los militares, el Intendente Arancibia y sus compañeros fueron sometidos a Consejo de Guerra y condenados a cadena perpetua. El presidente de este autodesignado tribunal se presentó el día del juicio bajo evidente estado de intemperancia alcohólica. Hunter por su parte vestía uniforme militar, como lo ha confesado, y titulaba sus invenciones como “partes de guerra”.

 

Las autoridades legitimas y legales debieron sufrir, además de las torturas, largos años de prisión y luego un exilio que duró más de diez años.

 

La detención y enjuiciamiento de estas personas fue tan abusiva que provocó una amplia repulsa internacional que se expresó entre otras cosas en que el gobierno derechista de Francia, del entonces presidente Valery Giscard, enviara al  abogado J.F Stasi  como observador al juicio que duró sólo una mañana y en que las defensas, censuradas previamente, sólo pudieron ser leídas.

 

El doctor Arancibia vivió su exilio en Francia donde se transformó en un destacado académico. Los enjuiciadores por su parte fueron desplegando una larga trayectoria delictual que ha quedado plasmada en sus prontuarios policiales y judiciales.

 

Estos crímenes de lesa humanidad, imprescriptibles e inanmistiables, están siendo investigados por el ministro de la Corte Valdiviana Juan Ignacio Correa Rosado.

 

A mayor estropicio el ex teniente Patricio Kellet  fue calificado como exonerado político hace más de 10 años en circunstancias que la propia dictadura lo expulsó del ejército por un lío de dinero en la Intendencia de Santiago: cobra un millón y medio mensual este “exonerado”.

 

Ha acumulado también un nutrido prontuario que incluye estafas, apropiaciones indebidas, giro dolosos de cheques y otras defraudaciones .

 

Este sujeto ha confesado que en Valdivia se detuvieron más de 3.000 personas en circunstancia que la población penal común era de 600. Públicamente se jactaba que “los upelientos cada día aguantan menos”. Un día después de uno de esos comentarios apareció acribillado a balazos el presidente de la JS valdiviana Victor Hugo Carreño. Aunque el oficial jefe de la patrulla se encuentra procesado,  indudablemente hay allí responsabilidades pendientes.

 

Su actuar era tan brutal que tuvo diferendos con otros militares que han declarado en el proceso.

 

Se espera una respuesta para la solicitud de procesamiento para los próximos días.

 

El abogado Avila señaló “durante casi un año y medio hemos adjuntado al proceso innumerables y sólidas pruebas que acreditan de sobra la existencia de estos delitos y la participación en ellos, en calidad de autor, de Patricio Kellet Oyarzún; estamos a la espera de la respuesta del tribunal”.

 

Respecto de los otros involucrados en estos crímenes de lesa humanidad, como el periodista Eduardo Hunter y el dentista Armando Robles Jensen, quien le aplicaba electricidad en los dientes a los detenidos, Avila concluyó que “su hora con la justicia es inminente; ya no se irán de este mundo en la impunidad, no podran sostener las mentiras que fueron a decir al tribunal”.

 

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