La República Popular Democrática de Corea (RPDC) prohibió hoy la entrada de los trabajadores surcoreanos al complejo industrial que ambas partes mantienen en la localidad fronteriza norcoreana de Kaesong, informó en Seúl un vocero oficial citado por la prensa china.
De acuerdo con las versiones transmitidas en esta capital, la RPDC notificó a la parte surcoreana que prohibía la entrada al parque industrial de Kaesong y que solo permitiría el retorno a territorio surcoreanos de los trabajadores que se encontraban en esa instalación.
Rusia cree que cualquier error aleatorio en la península coreana puede dejar la situación fuera de control, afirmó el viceministro de Relaciones Exteriores, Ígor Morgúlov.
“No creo que ninguna de las partes del conflicto busque deliberadamente el comienzo de las hostilidades, pero en las condiciones actuales de tensión cerca de la península, el error humano más simple o un fallo técnico podría dejar la situación fuera de control, y esta podría caer en una profunda crisis y de grandes proporciones”, indicó el miércoles el viceministro de Exteriores ruso, citado por la agencia Interfax.
El vocero Kim Hyung-seok, del Ministerio de Unificación de Sudcorea que está a cargo del diálogo y la cooperación con la RPDC en la parte sur de la península, dijo que el Gobierno de Seúl lamentaba profundamente el fracaso del movimiento normal a traves de la frontera.
En una conferencia de prensa en Seúl reportada por la agencia china de noticias Xinhua, el funcionario aseguró que Surcorea priorizará la seguridad de sus trabajadores en ese complejo industrial, donde están representadas unas 120 compañías surcoreanas.
Ayer, la RPDC anunció que reiniciaría el trabajo de un reactor de grafito de cinco megawatts que había cerrado en 2007 por acuerdo de las negociaciones a seis bandas (China, Rusia, Japón, Estados Unidos, Surcorea y Norcorea).
Esas negociaciones están estancadas desde 2008, cuando Corea del Norte se retiró en protesta por las presiones en su contra lideradas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Las más recientes tensiones en la península coreana comenzaron luego de las maniobras militares a gran escala de Surcorea y Estados Unidos (Foal Eagle y Key Resolve) con el uso de los bombarderos estratégicos B-2, que Pyongyang considera son ensayos de un posible golpe nuclear contra su país.
Como contramedidas a esas provocaciones, el gobierno de la RPDC declaró que había entrado en fase de guerra contra Surcorea, anuló el Acuerdo de Armisticio suscrito en 1953 para poner fin a la guerra de Corea y los tratados de no agresión, y suspendió las líneas de comunicación telefónica entre las dos partes
Corea del Sur no descarta acciones militares
El ministro de Defensa de Corea del Sur aseguró que considera todas las opciones, incluida la acción militar, en el caso de que los surcoreanos que se encuentran en Corea del Norte estén en peligro, informó la agencia surcoreana Yonhap.
El ministro Kim Kwan-jin hizo estas declaraciones después de que Pyongyang informase a Seúl de que prohibía el acceso de los trabajadores surcoreanos al complejo industrial de Kaesong, ubicado al norte de la frontera que divide las dos Coreas y administrado de forma conjunta. A pesar de la escalada de tensión en la península coreana, hasta el momento se había mantenido un acceso continuo y sin restricciones al complejo industrial intercoreano.