Una demanda contra la EPA, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, por su negativa a prohibir los plaguicidas neonicotinoides clotianidina y tiametoxan, responsables de la muerte de abejas, entablaron el 21 de marzo de 2013 organizaciones que representan a apicultores y ambientalistas.
La Red de Acción en Plaguicidas de Norte América PANNA, es una de las organizaciones firmantes, junto al Center for Food Safety, Beyond Pesticides, y el Sierra Club. Los apicultores que suscriben la demanda ante el tribunal Federal representan a productores de Old Mill Honey, Family Farms, Niwot Honey Farm y Bill Rhodes Honey. Los insecticidas, fabricados por las transnacionales Bayer y Syngena, son derivados de la nicotina, que es un veneno. El daño que producen ha quedado demostrado en numerosos estudios, entre ellos una investigación dada a conocer a fines del año pasado por la Autoridad Sanitaria Europea, EFSA, que recomendó suspender su uso.
“En Chile, el uso de clotianidina y tiametoxam, dos insecticidas altamente peligrosos para las abejas, está autorizado por el SAG, sin tomar en cuenta los estudios que han alertado sobre los daños a especies benéficas directamente relacionadas con la polinización y producción de alimentos”, afirmó María Elena Rozas, coordinadora de RAP-Chile. La Red de Acción en Plaguicidas Chile, es miembro de RAP-AL, la red latinoamericana integrante de la red global PAN, Pesticide Action Network. En Chile desarrolla su trabajo en favor de la agroecología y de la eliminación del uso de plaguicidas, en estrecho contacto con las organizaciones de los apicultores, tales como la Red Nacional Apícola y Fedemiel, así como con los agricultores orgánicos y organizaciones campesinas y de consumidores. Participa en la campaña Yo NO Quiero Transgénicos en Chile, contribuyendo a visibilizar el impacto de los plaguicidas y los transgénicos en la salud de las personas y el ambiente.
La querella de las organizaciones de Estados Unidos contra EPA cuenta con el apoyo jurídico del Centro para la Seguridad Alimentaria (Center for Food Safety). Un año atrás una coalición similar de organizaciones y apicultores había presentado ante esa agencia una Petición Urgente exigiendo la suspensión del uso de clotianidina, que tenía una aprobación provisoria. Sin embargo la agencia respondió anunciando que el proceso de revisión de estos dos plaguicidas y de otros neonicotinoides continuaría hasta el 2018 y que entretanto se seguiría usando.
El comunicado de prensa de las organizaciones citadas denuncia la grave mortandad de abejas causada en el último año, que en muchos casos llega al 50% de las colmenas. Ello ha tenido como consecuencia que no ha habido suficientes abejas para polinizar los almendrales de California. Los grandes productores de almendras no pudieron contratar suficientes servicios de polinización debido al masivo colapso de colmenas
que se registra en Estados Unidos.
Riesgos para abejas y el ecosistema
Científicos independientes han evaluado los efectos de clotianidina y tiametoxam en la salud de las colmenas y en su desarrollo, examinando los efectos de la exposicion sub letal y los riesgos agudos. Los científicos también han identificado enormes vacíos de información que impiden evaluaciones exactas respecto de lo que representan para la seguridad no sólo de las abejas sino para el ecosistema en toda su dimensión. Un informe importante, “El Impacto en Aves de los Plaguicidas más Usados en Estados Unidos”, dado a conocer esta semana por The American Bird Conservancy, da a conocer advertencias sobre el fracaso de EPA respecto de la evaluación de las amenazas que representan los plaguicidas para las aves y los ecosistemas acuáticos de los cuales dependen muchas especies.
La Autoridad Europea de Seguridad Sanitaria asoció a tres insecticidas, imidacloprid, clotianidina y tiametoxam con el colapso y mortandad de las colonias de abejas. Está pendiente una decisión definitiva respecto de su prohibición, ya que la propuesta de EFSA no alcanzó la mayoría necesaria en la Comisión Europea para suspender por dos años su uso. El 15 de marzo de este año, los representantes gubernamentales de 13 países de la Unión Europea (UE) votaron a favor de una prohibición temporal de estos tres plaguicidas. La votación tuvo lugar tras meses de intensa presión de Bayer y Syngenta para que la propuesta no saliera adelante.Una mayoría relativa de los 27 países de la Unión Europea (entre ellos Francia, Italia, España, Polonia, los Países Bajos y Bélgica) apoyó la medida, pero Rumanía, Hungría y Finlandia, entre otros, votaron en contra, mientras que cinco se abstuvieron (incluyendo Reino Unido, Alemania y Bulgaria). Ante ello, la Comisión puede presentar una nueva propuesta o remitir el asunto a un órgano superior formado por los representantes nacionales.
En todo el mundo, los apicultores han expresado su apoyo a las acciones en favor de las abejas y esperan que se den pasos efectivos a nivel legal que permitan terminar con una de las causas más importantes del síndrome del colapso de las colmenas: el uso de insecticidas altamente peligrosos. En el país, RAP-Chile se une a esas demandas exigiendo a SAG que en forma urgente adopte medidas orientadas a prohibir estos insecticidas, en favor de la apicultura y la biodiversidad.
Nota: La fuente del comunicado de prensa de las organizaciones norteamericanas (en inglés) es: http://www.panna.org/press-release/beekeepers-and-public-interest-groups-sue-epa-over-bee-toxic-pesticides