“La situación que viven los soldados se alarga por demasiado tiempo y un error no se corrige con otro error. Esto seguirá escalando y si alguien en el Gobierno de Chile cree que es un escenario político propicio para nuestro conflicto con Perú en la Haya está completamente loco“, señaló esta mañana enfáticamente el senador Alejandro Navarro vicepresidente del Senado de Chile y presidente del partido Movimiento Amplio Social, MAS.
En ese sentido el legislador comentó que “aún es tiempo de rectificar. Este gobierno ha retrocedido todo lo avanzado en los 4 gobiernos de la Concertación con Aylwin, Frei, Lagos y Bachelet”. Y agregó: “Chile debe tener en los próximos 2 años una Constitución democrática refrendada por el voto de todos los Chilenos y preguntarle a nuestro pueblo sobre las condiciones para una salida al mar para Bolivia. Las cosas como están son malas para Chile y son malas para Bolivia”, afirmó.
E indicó: “Dejémonos de engaños. Esto no se resuelve deteniendo soldados conscriptos o haciendo gallitos de fuerza verbal en medio de la CELAC. Esto requiere de política de Estado y no es política de Estado detener soldados. Chile se aísla peligrosamente en América Latina”.
A su vez llamó al Presidente Piñera a “levantar los absurdos cargos y dejar a los Fiscales hagan su tarea de perseguir a los delincuentes que en Chile ya no están de fiesta, sino que de carnaval”.
En tanto, ayer el diputado Hugo Gutiérrez (PC) deploró la resolución judicial, en torno a la detención de los tres soldados bolivianos sorprendidos tras cruzar la frontera de Chile, con armamento en su poder.
El diputado dijo que “si algo puedo hacer para distender este conflicto, lo voy a hacer y es por eso que estoy aportando mi domicilio para que estos soldados se encuentren en él, mientras se termina – como se va a terminar, de manera satisfactoria-, para estos soldados que yo siento que, sin duda, su privación de libertad es injusta”.
El conflicto, que gatilló el reclamo de Evo Morales ante la ONU y críticas cruzadas con el gobierno de Chile, ha sido comparada por la administración paceña con la demanda marítima, y a la vez motivó el viaje de parlamentarios bolivianos a Chile, para informarse del estado de los efectivos.