El hijo El Islam de Kagafi, vuelve a la tele. El calvo ya no suda.La comunidad o la ONU o las mentes de los dinosaurios gobernantes del mundo no se pusieron de acuerdo para lo de la zona de exclusión aérea y los aviones occidentales de Ka ya bombardearon el aeropuerto.
Llegará tarde vuestra ayuda pandilla de locos. Vuestros avioncitos. Esos zánganos atómicos.Esa torpeza que os caracteriza.Estamos recuperando Libia para mi familia.Para mi tribu de los interesados en inyectarse petróleo.
Nuestros muchachos erradicaran las bandas rebeldes y eso si los que ahora dejen las armas y la tontera les daremos aministía.
Una nueva Libia una grande y libre se aparece desde el mar como un inmenso camello de oro con Kagafi arriba o montado entre sus dos jorobas.
Armado con vuestras armas. Un camello de oro que por su venas le corre petróleo
Yo prefiero los fiats atómicos. Que a la vez son submarinos y autos como el que podría tener Bond, James Bond.
La madre tierra mató en el Japón y el dolor nos tiene atónitos, estupefactos.
Esto lo sabe El Islam y sabe que ya no suda tanto como hace unos días y espera arrasar la segunda ciudad de Libia y sede de las bandas de delincuentes de Osama y sus aliados occidentales.
Estaremos en Bengasi en menos de lo que canta un camello intentando cruzar por el ojal de la historia.
Seguramente escucharéis los bombardeos y vuestra retórica son sólo burbujas sopladas por el aire atómico de la impotencia.
¡Viva Libia!