El presidente estadounidense, Donald Trump, defendió hoy a su nominada para dirigir la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Gina Haspel, a quien se refirió como la mejor opción en aras de desempeñar ese cargo.
De acuerdo con el mandatario republicano, cuyos comentarios aparecieron en su cuenta personal de la red social Twitter, Haspel ha sido objeto de ataques por resultar 'demasiado dura con los terroristas'.
'Tenemos a la persona más cualificada, una mujer, que los demócratas quieren fuera porque es demasiado fuerte contra el terror', recalcó el gobernante.
Haspel ofreció hace dos días retirarse de la nominación pues algunos funcionarios del Gobierno estadounidense le expresaron preocupación sobre la capacidad para ser confirmada, difundieron ayer medios locales de prensa.
Según reportes del diario The Washington Post y la televisora CNN, durante una reunión celebrada en la Casa Blanca, la candidata, cuestionada por su papel en técnicas de interrogatorios consideradas tortura, se manifestó dispuesta a retirarse si eso ayudaba con la situación.
Expresó, sostuvo el periódico, que se haría a un lado si evitaba el espectáculo de una audiencia de confirmación brutal y un daño potencial a la reputación de la CIA y la suya propia.
Más tarde, ese mismo día, el director de asuntos legislativos de la mansión ejecutiva, Marc Short, y la secretaria de prensa, Sarah Sanders, fueron a la sede de la agencia en Virginia para hablar con Haspel, precisó CNN al citar a dos personas familiarizadas con lo sucedido.
Finalmente, la tensión pareció aliviarse y, hasta el momento, su nominación sigue en pie, indicaron las fuentes sobre Haspel, quien debe enfrentar pasado mañana su audiencia de confirmación en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
El pasado 23 de abril más de un centenar de generales retirados pidieron a la Cámara Alta analizar con profundidad a la actual subdirectora de la CIA.
Mediante una carta dirigida a los legisladores expusieron su profunda preocupación sobre el tema y exhortaron a examinar de cerca toda la participación de Haspel en el programa de entrega, detención e interrogación.
No aceptamos los esfuerzos para disculparla por la tortura y otros abusos ilícitos de los detenidos con la excusa de que 'solo seguía órdenes' o que el impacto de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 justifica la conducta ilegal y poco ética, acotaron.
Tres días antes de esa misiva, la CIA desclasificó un memorando que fue visto como destinado a allanar el camino para la confirmación.
Dicho documento absolvió a la mujer de la responsabilidad de destruir cintas de video en 2005 que muestran la aplicación de técnicas de torturas contra sospechosos de terrorismo.
Haspel 'actuó apropiadamente' y 'no hizo nada malo' al llevar a cabo órdenes de destruir evidencias sobre los interrogatorios en una prisión de un 'sitio oscuro' en Tailandia, consideró el otrora subdirector de la CIA Michael Morell en el texto divulgado.
