No es trivial lo que se juega Chile este domingo. No es lo mismo Piñera que Guillier, no da lo mismo para la suerte de los chilenos quien sea el Presidente de la República en un régimen presidencial como es el nuestro. Siempre, en todos los ámbitos, la suerte puede ser peor, cuando crees tocar fondo, descubres que aún puedes descender más. El trance que vive Chile hoy, aún no tiene desenlace como creen algunos que se resisten a participar de las elecciones.
Este domingo, es de esperar que la juventud concurra a votar en masa, debemos parar la arremetida, estamos recién estructurando un contra poder oponible al poder omnipresente de los dueños de Chile que se benefician con el capitalismo a ultranza que se aplica. La desrregulación del mercado ya sabemos bien donde conduce: concentración del poder y riqueza en manos de unos pocos, y el adormecimiento y control social de las víctimas.
No puede ser que muchos compren el cuento que con la aplicación del capitalismo sin controles, van a tener más trabajo, y la plata va a chorrear desde las alturas; sabemos que no es así, el modelo está agotado
En el retail, donde se concentra gran parte de los trabajadores, se gana el mínimo, y se trabaja excediendo el máximo.
Los aprontes en materia de AFP nos dice que el negocio no se financia, los pensionados no se mueren a tiempo, de modo que se postergará la edad de jubilar por 3 a 5 años más. Tal vez ese sea el trabajo que están promocionando, trabajar más años, y mientras más viejos menores son las remuneraciones y se hace más precaria la jubilación.
Con convicción creo que es el momento de salir a pararlos, y votar por Guillier consiste precisamente en eso.
La Derecha es la primera en salir a decir que quien quiera gobernar tiene necesariamente que negociar, sin embargo, eligiendo a Piñera, la verdad de las cosas, es que podrá gobernar por simple mayoría.
De acuerdo con los resultados de las elecciones últimas, la Derecha controla la masa crítica de senadores y diputados, está a 2 diputados y 2 senadores de conseguirla. Están callados esperando ganar estas elecciones para pasar la aplanadora, la retroescavadora, los guanacos, los zorrillos, las tanquetas, y acaso los tanques.
No podemos ser tan miopes.
René Dintrans