Luego de las presiones del presidente Tabaré Vázquez al Frente Amplio Uruguayo, donde un grupo importante de sus fuerzas políticas se oponen al TLC con Chile, este viernes la coalición oficialista oriental se reunirá para analizar el tema. Al respecto, la plataforma Chile Mejor sin TLC afirmó que práctica de negociaciones secretas y sin fundamentos técnicos debe detenerse.
Paulina Acevedo, del Observatorio Ciudadano y la Plataforma Chile Mejor sin TLC, comentó que “este acuerdo está lejos de tener como foco la unión y bienestar de los pueblos. Se trata de un acuerdo comercial de última generación que contiene normas y mecanismos de solución de controversias que limitan ámbitos derechos esenciales de las personas”. Acevedo agregó que “este TLC supedita la protección del medio ambiente y los derechos laborales a las reglas del mercado y la acción impropia de las empresas trasnacionales, sin respetar además el derecho a la consulta indígena que debe habilitarse durante la tramitación legislativa de este tipo de acuerdo”.
Por su parte, Esteban Silva, de Fundación Constituyente XXI y también miembro de Chile Mejor sin TLC, afirmó que el tratado entre Chile y Uruguay “no tuvo ni ha tenido diálogo ni consulta previa informada ni participación de las organizaciones sociales y de las y los trabajadores de ambos países, a pesar de que se trata de dos gobiernos que se califican de progresistas”.
Las organizaciones deploraron además, que se use el capítulo de Género y Comercio como un argumento para validar el tratado, pues el texto de conocimiento público, no contiene nada vinculante, como sí lo tiene el capítulo de Inversiones. Por ello, calificaron el capítulo de Género como “una utilización de esta justa demanda de nuestras sociedades para blanquear los aspectos más cuestionables del Tratado”.
Desde la plataforma Chile Mejor sin TLC se hizo, un llamado a los parlamentarios de Chile y Uruguay a no ratificar este TLC y exigir como requisito previo, primero, la realización de estudios independientes efectuados en conjunto por instituciones de Chile y Uruguay sobre su impactos y alcances. Y, segundo, la participación activa de las organizaciones sociales y de trabajadores de ambos países en el debate previo sobre los estudios de impacto del TLC ante ambos parlamentos.
En tal sentido insistieron en la idea de Moratoria, es decir, que el Parlamento chileno no vote más tratados de Libre Comercio mientras no se realicen los estudios de evaluación de los implementados hasta el momento.