La división partidista en Estados Unidos muestra su nivel más alto en décadas, cuando republicanos y demócratas tienen visiones muy dispares sobre temas como raza, inmigración, seguridad y medio ambiente, indicó hoy el Centro de Investigaciones Pew.
De acuerdo con la organización, las diferencias entre las dos principales fuerzas políticas del país alcanzaron niveles récords durante la presidencia de Barack Obama (2009-2017), y en el primer año del mandato de Donald Trump estas brechas han crecido aún más.
Como parte de un estudio realizado en el verano, el centro preguntó a más de cinco mil adultos su opinión acerca de 10 temas políticos específicos, que incluyen cuestiones como la regulación gubernamental, el matrimonio homosexual o las normas ambientales.
A partir de esa encuesta se encontró que, como promedio, había una brecha de 36 puntos entre el criterio de republicanos y demócratas, lo cual supone un aumento de 21 puntos en comparación con el 1994, cuando la institución comenzó a analizar esas divisiones.
Las brechas más amplias estuvieron en las opiniones sobre la raza y la ayuda del gobierno a los pobres.
En el primero de esos asuntos, el 64% de los demócratas consideró que la discriminación racial es el principal motivo por el que muchas personas negras no logran avanzar en la sociedad norteamericana actual, pero solo un 14% de los republicanos compartieron esa postura.
Además, el 71% de los votantes del partido azul estimó que el gobierno debe hacer más para ayudar a los necesitados, mientras esa cifra fue de 24% entre los de la formación roja.
Por otra parte, casi dos tercios de los estadounidenses sostienen que los inmigrantes fortalecen al país “debido a su trabajo y sus talentos”, y solo un 26% estima que son una carga “porque toman nuestros empleos”.
Sin embargo, al ir a las posiciones partidistas, el 84% de los demócratas valora el aporte de esas personas a la sociedad, un número que duplica al de los republicanos con ese mismo punto de vista.
En la perspectiva frente al uso de la diplomacia, en tanto, el 83% de los demócratas consideró que se trata de la mejor manera de asegurar la paz, pero para el 53% de los republicanos la forma más adecuada de alcanzarla es a través de la fuerza militar.
Con respecto a las regulaciones ambientales, el 58% de la formación roja apuntó que cuestan muchos puestos de trabajo y perjudican a la economía, frente a un 20% de seguidores del partido azul con similar criterio.