En el país del golpe, las grandes decisiones son tomadas en Washington y Wall Street, y la orden dada es vender y saquear a Brasil, denunció hoy en un comunicado el Partido de los Trabajadores (PT).
El golpe (parlamentario-judicial perpetrado el pasado año contra la presidenta constitucional Dilma Rousseff) siempre tuvo como propósito principal hacer retroceder a Brasil a la época colonial, de país pequeño, dependiente, tecnológicamente atrasado y sumiso a los intereses del gran capital internacional, remarcó.
La declaración del partido que durante más de 12 años gobernó Brasil, colocándolo entre las primeras seis economías del mundo y excluyéndolo del mapa mundial del hambre, fue emitida a propósito de la ampliación del plan de privatizaciones anunciado la víspera por el gobierno de Michel Temer.
En realidad, el verdadero motivo para la implantación de esas medidas antibrasileñas es realizar grandes negociados que solo enriquecerán a los golpistas y sus socios en detrimento de los intereses nacionales, advirtió.
El texto subraya la indignación con que el Partido de los Trabajadores recibió el anuncio sobre la decisión de privatizar, a precios enteramente disminuidos, el patrimonio público nacional, incluso la estratégica empresa Electrobras, una de las mayores generadoras de energía eléctrica del mundo, y hasta la Casa de la Moneda.
Esas nuevas medidas -remarca- dan continuidad al proceso acelerado e irrestricto acometido por el gobierno golpista de Michel Temer para vender el patrimonio del pueblo do Brasil a precios irrisorios y destruir todos los mecanismos de que dispone el Estado para impulsar el desarrollo nacional.
Señala además que las justificaciones pretextadas para cometer esos crímenes contra el patrimonio público y la economía nacional son las mismas presentadas en la época de Fernando Henrique Cardoso: reducir déficits, disminuir costos para el consumidor y aumentar la eficiencia económica.
Mas, como en aquella época, ninguna de ellas se sustenta, alerta el PT y llama ‘a la población que ama a Brasil y a todas las fuerzas nacionales’ a resistir de todas las formas posible esos crímenes que condenan al país y las futuras generaciones a la desigualdad, la dependencia, el atraso y la sumisión.
La víspera, y después de anunciada la venta de Electrobras, el Consejo del Programa de Asociaciones en Inversiones (PPI) decidió además incluir en el programa privatizador la Casa de la Moneda, la lotería instantánea (Lotex), la Compañía Docas do Espírito Santo y diversas carreteras.
En total, dijo la Agencia Brasil, se trata de 57 proyectos de privatización y concesión, que incluyen también aeropuertos, líneas de transmisión eléctrica y terminales portuarias, con lo cual el gobierno Temer, sumergido en una aguda crisis fiscal y económica, espera recaudar 14 mil millones de dólares a partir de este año.