Cuba publicó este martes la hoja de ruta política para los próximos cinco años que no muestran nuevas iniciativas locales, pero mejoran las condiciones para la inversión extranjera que son fundamentales para algunos sectores de una economía dirigida por el Partido Comunista.
Los 275 puntos del plan económico y social son muy similares a los del plan que Cuba adoptó en 2011, en el que se abogaba por una descentralización de la economía, apoyo a las pequeñas empresas, reconocimiento de las fuerzas del mercado y la necesidad de que aumente la inversión extranjera.
El plan de reformas de 2011 aún tiene que implementarse en plenitud porque han encontrado una dura resistencia en la burocracia, dijo el presidente Raúl Castro en el Congreso del Partido Comunista, en abril.
En los lineamientos se reconoce la existencia objetiva de las relaciones del mercado. Pero también se subraya el compromiso con una economía centralizada. Se establece que no se permitirá la concentración de propiedades y riqueza, e incluye el compromiso de mejorar el servicio de Internet, aunque sólo gradualmente, según lo permitan las posibilidades económicas, en una de las naciones con peor conectividad del mundo.
Otro documento del Partido Comunista publicado en mayo y que delinea la visión del partido para el país hasta 2030, menciona el nuevo reconocimiento legal de la pequeña y mediana empresa. Actualmente, los comercios privados únicamente son permitidos bajo una categoría especial de autoempleo, lo que representa problemas para las empresas que no se apegan a una burocracia que no las reconoce de manera oficial.
Los nuevos lineamientos no contienen detalles sobre dicha reforma, lo que proyecta dudas sobre si entrarán en efecto dentro de un futuro cercano.