En la primera gran manifestación contra las políticas de ajuste del gobierno argentino, los trabajadores estatales acompañados por otros gremios y organizaciones sociales se movilizaron en todo el país y en esta capital colmaron la Plaza de Mayo.
“Estamos protestando para poner freno a los despidos. Ya son más de 21 mil en la administración pública en los niveles nacional, provincial y municipal desde que asumió el gobierno de Mauricio Macri”, dijo a Prensa Latina Hugo Godoy, líder de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE).
“Reclamamos que cesen las expulsiones, que se reincorporen a los trabajadores echados, que se reabran las negociaciones por nuevos contratos laborales para incorporar el necesario aumento de salarios sin topes, y para discutir la precarización laboral”, añadió.
El “Cachorro” Godoy, como se le conoce, encabezaba el bloque principal de ATE en la marcha por la Avenida de Mayo hacia la Plaza frente a la Casa Rosada. Ese espacio citadino se quedó pequeño ante la multitud de trabajadores que engrosó la concentración.
“En esta masiva movilización también expresamos nuestro repudio al protocolo de seguridad que decretó el gobierno para criminalizar las manifestaciones populares”, señaló el secretario nacional de ATE.
La gigantesca protesta de reclamo coincidió con la puesta en vigor hoy de las nuevas medidas antipiquetes que presentó la semana pasada la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
A la marcha por las calles de Buenos Aires y concentración en Plaza de Mayo se sumaron manifestaciones -corroboró Prensa Latina- en Santa Fe, Córdoba, Río Negro, Entre Ríos y Santa Cruz, entre otras provincias.
“Están movilizados las 120 secciones de ATE en Capital y Provincia de Buenos Aires, además de los otros sectores en el resto del país. Esto es un paro y manifestación nacional”, precisó Luis Ernesto Rodríguez, delegado en la Escuela de Naútica.
A la pregunta sobre que en la movilización estaban agrupaciones que eran antagonistas entre sí durante la pasada administración, Rodríguez se refirió a la necesidad de una “unidad de acción porque los despidos nos están golpeando a todos”.
Concurrieron representaciones de ATE de los sectores de la salud, científico, tecnológico, educación de primero y segundo nivel y universitaria, trabajadores portuarios y marítimos, entre otros.
Los acompañaron miembros de otros sindicatos, organizaciones como La Campora, Unidos y Organizados, Miles, Quebracho, Movimiento Evita, los partidos Humanista y Nuevo Encuentro y de la extrema izquierda.
En la movilización de ATE convergió la “Marcha de las 24 Horas”, que comenzó ayer al mediodía y tras recorrer puntos de la ciudad, incluida una caminata con antorchas anoche, terminó este miércoles en Plaza de Mayo.
Convocada por agrupaciones barriales de las villas pobres de Ciudad de la capital, reclaman las obras prometidas para el mejoramiento urbano de esas áreas. Mujeres incluso con sus hijos, muchos pequeños hasta en brazo y coches, componían el grueso de esa manifestación.