El presidente Evo Morales comenzará a celebrar hoy los 10 años de su asunción como jefe de Estado de Bolivia, el 22 de enero de 2006, con una ceremonia ancestral en la ciudad arqueológica de Tiahuanaco.
Como es tradicional el primer presidente indígena en la historia del país festejará allí, en tierras donde antaño se concentró la civilización Tiahuanaco y la cultura preincaica, y agradecerá a la Pachamama -Madre Tierra- su apoyo durante una década de gestión gubernamental.
En ese período, Morales y sus seguidores no solo sacaron al país de la extrema pobreza, sino que lo encumbraron a ser uno de los más estables y prósperos de la región con un crecimiento económico sobre el cinco por ciento y con el objetivo de erigirse como centro energético de Sudamérica.
El modelo económico social productivo comunitario, eje del proceso de cambio, permitió en 2013 llevar el Producto Interno Bruto a un 6,83 por ciento, récord; en tanto un año después marcó 5,5 por ciento, en 2015 lo fijó en un 5,01 y para 2016 se prevé que aumente hasta el 5,08.
De acuerdo con un informe del ministro de Culturas, Marko Machicao, el gabinete ministerial, viceministros y directores de las empresas estratégicas del país estarán presentes en la zona desde bien temprano para apoyar al presidente del Estado Plurinacional de Bolivia.
En la ceremonia,de 45 minutos, los amautas -hombres sabios- de Tiahuanaco ofrecerán una Koa, un ritual para la buena producción y la buena suerte personal.
Mañana el dignatario celebrará también en la capital los 10 años de su gestión, primero con una reunión en la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde presentará un informe de su trabajo durante ese período en el poder.
Posteriormente, añade en la nota Machicao, se desarrollará un desfile cívico con la participación de movimientos sociales de diferentes regiones del país, así como invitados especiales y delegaciones internacionales.