Mientras el Gobierno envió el proyecto al Congreso, los trabajadores de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos protestaron por solo ser considerados como un servicio dentro de la nueva estructura y no una subsecretaría, como se había consensuado. La molestia escaló al punto que decretaron paro indefinido y trasciende que buscan la renuncia del director de la entidad, Ángel Cabeza.
La Presidenta Michelle Bachelet firmó este jueves la indicación sustitutiva que crea el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Así, en medio de aplausos y celebraciones, la mandataria dio el vamos al proyecto que ingresará al Parlamento por medio de la Cámara de Diputados.
Sin embargo, desde temprano los funcionarios de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) manifestaron su descontento con una iniciativa que, en su opinión, “no representa los intereses de los funcionarios”. Incluso, anunciaron una paralización nacional a partir de este viernes, al no sentirse oídos por las autoridades.
Margarita Hormazábal, presidenta de Anfudibam, explicó que como trabajadores les parece una “falta de respeto” que no se mantenga el modelo de ministerio que habían diseñado con las autoridades: “Hicimos encuentros, hay documentación que respalda lo que los funcionarios en esas oportunidades expresaron sobre la creación del nuevo ministerio y sobre la necesidad de ser una subsecretaría y resulta que hoy se nos muestra un modelo completamente diferente, no consensuado con los trabajadores”, cuestionó.
El proyecto original contemplaba que la Dibam tenía continuidad como subsecretaría, pero en la propuesta anunciada hoy por el Ejecutivo el organismo queda en calidad de servicio.
De esta manera, la actual propuesta especifica que existirán dos subsecretarías: una de las Artes y otra del Patrimonio Cultural. Este primer organismo tendrá a su cargo el Consejo Nacional del Libro y la Lectura, el Consejo de Fomento de la Música Nacional, el Consejo del Arte y la Industria Audiovisual y el Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes. Además, administrará las Secretarías Regionales Ministeriales de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que estarán presentes en las 15 regiones del país.
En tanto, la subsecretaría de Patrimonio Cultural tendrá a su cargo el nuevo Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, organismo que funcionará como continuador de la Dibam. De acuerdo a ello, formarán parte de este organismo instituciones tales como la Biblioteca Nacional, el Archivo Nacional, el Museo Nacional de Bellas Artes, el Museo Histórico Nacional, el Museo Nacional de Historia Natural, la Cineteca Nacional y la Secretaría Ejecutiva del Consejo de Monumentos Nacionales.
Respecto de las críticas y los cambios al proyecto, el ministro de Cultura, Ernesto Ottone, señaló que “lo que se hizo es integrar cada una de las demandas y los resultados de la consulta a los pueblos indígenas. Se transforma una institucionalidad en algo robusto, que reconoce cierta especificidad de las instituciones. Por eso se crean las subsecretarías, que era algo fundamental para tener equilibrado este futuro ministerio”.
La molestia de los trabajadores apunta al director de la Dibam, Ángel Cabeza, a quien responsabilizan por no defender sus intereses. Incluso, se ha planteado la posibilidad de pedir su renuncia. “Tenemos el sentimiento de que el resultado final nació del esfuerzo de nuestro director por imponer que seamos un Servicio Nacional del Patrimonio sólo ejecutante y no pensante. Nuestro director nos perjudicó, nunca peleó por nosotros y se limitó a informarnos de sus conversaciones con el Consejo de la Cultura”, declaró Margarita Hormazábal.