Con la llegada del nuevo gobierno en Argentina el Grupo Techint, la mayor corporación del país, anunció su intención de imponer una rebaja de salarios a cientos de trabajadores de la Unión de Obreros Metalúrgicos (UOM).
El diario Página 12 informa este domingo que la amenaza de recortar 20 por ciento de los sueldos recae sobre trabajadores hoy suspendidos o la otra variante es despedirlos, lo cual se convierte en una clave para la administración de Mauricio Macri.
En la UOM evalúan que esta drástica medida regresiva en términos laborales y sociales de Techint, que abre las puertas para la imitación a otros conglomerados económicos, aparece en el debut de un nuevo ciclo político en Argentina con el mandato macrista, señala el periódico.
Empresarios y sindicalistas admiten que durante el kirchnerismo la reducción salarial o los despidos eran frenados. Ahora Techint se propone enviar la señal al resto del sector privado de que con Macri comienza una nueva etapa en la relación con los trabajadores y gremios, alertan desde el importante gremio.
Página 12 recuerda que algo similar ocurrió en los primeros años del gobierno de Carlos Menem, cuando la empresa Aluar cortó 20 por ciento su plantilla administrativa y aplicó un régimen de flexibilización laboral.
En esos primeros años de 1990, el tío de Macri, Jorge Blanco Villegas, era el presidente de la Unión Industrial de Argentina y ante el conflicto desatado en Aluar respaldaba ese ajuste, e incluso sugería que había que reducir 25 por ciento los salarios nominales, rememora el diario.
Ahora, la megadevaluación adelantada por el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, facilitará la reducción de los salarios en dólares así como la disminución del valor de los ahorros. “Pero la política laboral esbozada por el grupo empresario quiere avanzar aún más”, advierten desde la UOM.
La conformación por Macri de su equipo ejecutivo al que incorporó jefes de grandes empresas argentinas y transnacionales puede implicar un retroceso en los avances laborales, salariales y sindicales, comienzan a temer referentes gremiales.
Desde otro ángulo, el anuncio de Techint choca contra la realidad de que la economía argentina no está mal como pintaban durante la campaña electoral el propio Macri y sus asesores ahora convertidos en ministros e importantes funcionarios.
Después de prometer unificar la tasa de cambio lo cual implica una megadevaluación, liberar el cepo a la compra de divisas y levantar los impuestos a los productores agrícolas el mismo 11 de diciembre, Prat-Gay se retractó y dijo que no era el momento oportuno.
Ahora desde el gobierno se habla de un “colchón de divisas” y se admite que “la situación no es crítica”, y que cualquier medida económica se adoptará para marzo después de las vacaciones del verano austral que acaba de comenzar.