Donald Trump, líder en la contienda por la nominación presidencial del partido Republicano, se jactó de su ventaja en las encuestas, criticó fuertemente a comités independientes de acción política y minimizó a sus adversarios Marco Rubio y Jeb Bush en un acto de campaña en Florida, el estado natal de ellos.
Hablando el sábado ante miles de personas que llenaron la Robarts Arena en Sarasota, Trump dijo que él está “acabando con todos” en las encuestas a nivel nacional y en los estados donde se realizan las primeras elecciones.
Calificó a los Super Comités de Acción Política (super PACs en inglés) de ser “una estafa” porque los millones de dólares que recaudan van a parar a consultores y asesores costosos y están haciendo que los candidatos estén en deuda con grandes donantes.
Criticó a Rubio, senador federal de Florida, a quien calificó como “débil” con respecto a la inmigración ilegal y dijo que sus constituyentes deberían estar enojados con él porque ha fallado en muchas ocasiones al votar en la cámara alta en Washington.
“Estoy liderando en Florida sobre un senador”, se jactó Trump.
La multitud coreó “Trump, Trump, Trump”.
El empresario multimillonario dijo que él ya ni siquiera habla sobre Bush porque el ex gobernador de Florida está batallando para meterse en las encuestas. Sin embargo, calificó como inaceptable el apoyo de Bush a los estándares de educación denominados Common Core (Núcleo Común).
“Common Core está fuera”, dijo Trump, en caso de que sea elegido presidente.
Tanta gente se alineó para escuchar a Trump que él realizó un segundo mitin afuera de la arena para aproximadamente 1.000 personas que no pudieron ingresar. Luego se marchó en el helicóptero Trump. Al preguntársele por qué apoya a Trump, Justo López dijo que quería “deshacerse del grupo dominante y elegir a un republicano real”.
Otros estaban curiosos por saber más.
“Nunca lo había escuchado hablar en público y quería oír lo que tenía para decir”, dijo Lenny Fike, de Bradenton, quien agregó que está indeciso pero se inclina hacia Trump.
Sin embargo, Fike, un republicano, afirmó que no votaría por Trump si decide competir como un candidato independiente.
“Simplemente no quiero ver otro demócrata en la Casa Blanca”, dijo.
No todos son fanáticos de Trump.
Un par de decenas de manifestantes se reunieron frente a la arena para censurar a Trump.
“Nosotros rechazamos su mensaje racista y los otros republicanos deben rechazarlo también”, dijo Junior Salazar, quien encabezó a los manifestantes entonando “boten a Trump”.