Javier Rebolledo antes había publicado, bajo el mismo sello, La danza de los cuervos. El destino final de los detenidos desaparecidos y El despertar de los cuervos. Texas Verdes, el origen del exterminio en Chile, trabajos de investigación que dan cuenta de los centros de detención donde se torturó, asesinó y desapareció a miles de chilenos tras el golpe militar de 1973. Los protagonistas de aquellos libros fueron los servicios de seguridad encabezados por la DINA, el siniestro aparato represor creado por Manuel Contreras para encargarse de la persecución de los militantes de la Unidad Popular, poniendo especial énfasis en el MIR y el Partido Comunista. En esta ocasión, los protagonistas son los cómplices civiles de la dictadura, que ampararon los crímenes y colaboraron con los militares, suministrándoles diferentes tipos de ayuda.
La investigación se centra, fundamentalmente, en miembros de las familias Matte y Kast, pertenecientes a la oligarquía opositora al presidente Allende y que conspiró para derrocar su gobierno. “En septiembre de 1973, diecinueve ciudadanos de Laja y San Rosendo desaparecieron luego de ser secuestrados por carabineros. Algunos de los prisioneros fueron señalados en su lugar de trabajo a la policía por una autoridad de la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones (CMPC) y luego trasladados en vehículos de la empresa para ser asesinados en un fundo explotado para Forestal Mininco, empresa integrante de CMPC”. ¿Quiénes eran los dueños de la papelera?: El clan Matte. Esta poderosa familia fortaleció sus negocios a la sombra de la tiranía pinochetista y jamás ha respondido por los asesinatos ocurridos en terrenos de su propiedad. Acá se entregan pormenores del actuar de sus miembros más destacados y de la impunidad que los rodea gracias a sus vínculos con la clase política, empresarial y militar. Los carabineros involucrados recién después de 38 años, en 2011, confesaron el crimen.
Otra familia involucrada en las violaciones a los derechos humanos es la familia Kast: “Apenas ocurrido el golpe, setenta campesinos de Paine que habían sido beneficiados por la Reforma Agraria, fueron hechos desaparecer. Los terratenientes expropiados, en conjunto con empresarios y pequeños comerciantes de derecha, se unieron a carabineros y militares para protagonizar la venganza. El ex oficial nazi, Michael Kast, facilitó alimentos a los comandos de exterminio, además de un camión. Su hijo Christian compartió asados con civiles y uniformados en el mismo lugar donde varios detenidos fueron torturados y, desde ahí, pasaron a formar parte de los detenidos desaparecidos. Más tarde, otro hijo de Michael, Miguel Kast, hombre elevado a la categoría de santo por la derecha, colaboró con el departamento económico de la DINA y comandó prácticamente todas las reformas económicas que hoy se encuentran vigentes en Chile”. Esta familia sigue evadiendo la justicia.
El volumen también trae un capítulo sobre “La Delación de Carlos Bombal”, cuando, en 1975, era jefe de gabinete del rector de la Universidad Católica, vicealmirante Jorge Swett, y la lista de militares “que el ejército no quiere que se conozca”. Este documento está marcado como Confidencial y dirigido al Ministro de Fuero de la Corte de Apelaciones de Santiago, don Leopoldo Llanos Sagristá. Allí se pueden conocer los nombres de los ex agentes de la DINA que aún siguen prestando servicio al ejército.
A la sombra de los cuervos. Los cómplices civiles de la dictadura (CEIBO Ediciones. 464 pág.). Javier Rebolledo.