La Presidenta, Michelle Bachelet, recorrió el borde costero de Coquimbo afectado por el tsunami que provocó el terremoto de 8,4 Richter, y conversó con un grupo de afectados. Bachelet enfatizó que el movimiento telúrico de ayer en la tarde “es el terremoto más grave de este año en el mundo, mucho más grande que otros que vimos en Nepal y en otros lados, donde observamos que era una destrucción masiva y con una enorme cantidad de fallecidos”.
Frente al terremoto, la máxima autoridad nacional destacó que “se demostraron varias cosas: la institucionalidad ha ido mejorando, con una respuesta rápida; los vecinos respondieron de manera extraordinaria, porque cooperaron y evacuaron. Si no hubiéramos evacuado, al entrar yo a esas casas y ver cómo están las casas, probablemente tendríamos muchas más muertes que lamentar. Hay aún algunas personas desaparecidas que se están buscando, pero creo que aquí ha habido una capacidad de respuesta rápida, que es lo que se requiere ante los desastres; una gran capacidad de la población de responder adecuadamente”.
Asimismo, remarcó que “todavía no han pasado 24 horas y estamos en la etapa de conocer en terreno los problemas, junto con el municipio, el alcalde, el intendente regional, el gobernador, para llegar con los apoyos que se requieren. Estamos recién partiendo, pero sabemos lo que hay que hacer y estamos trabajando a toda máquina. Y así le he pedido al intendente, que todos los seremis, que todos los expertos, digamos, se movilicen al terreno para llegar lo antes posible”.
“Hemos visitado poblaciones y lugares donde muchos comerciantes han sido afectados. Hemos tenido la oportunidad de conversar con los dirigentes de pescadores y del comercio de productos del mar y artesanales, y dimensionar la magnitud del daño, que es muy grave; estamos con un conjunto de ministros; se pasará casa por casa y comercio por comercio para hacer las fichas, para que las ayudas que existen, que lamentablemente ya hemos desarrollado con experiencia por todos los desastres naturales que nos ha tocado vivir, a la brevedad puedan llegar”, explicó la Mandataria.
En este contexto, detalló que “las primeras cosas que nos ha interesado es proteger a las personas y salvar las vidas; el alcalde de Coquimbo ha abierto varios albergues, hay personas que han optado por irse a las casas de sus familiares; pero luego, la segunda etapa es limpiar las calles y todo lo que la ola trajo para ayudar también luego a los vecinos a limpiar”.
Además, indicó que “hemos encargado que vengan a la región más fuerzas militares y policiales y den seguridad, también, a muchos vecinos que están preocupados”.