Hay un film cubano que se titula “Los pájaros tirándole a la escopeta”. No pude dejar de recordar su nombre al leer las declaraciones de Jovino Novoa y Michelle Bachelet respecto de la crisis de corrupción que afecta a la casta política y en que ambos son mencionados con frecuencia, por decir lo menos.
Novoa y Bachelet en apariencia se encuentran en sectores políticos distantes y contradictorios. Pero objetivamente ambos coinciden en el modelo económico y político neoliberal y su corrupta forma de funcionamiento que le es consustancial.
Estos dos integrantes de la casta política le deben muchas y circunstanciadas explicaciones políticas a la ciudadanía sin perjuicio de las que uno se ha negado a dar al Ministerio Público y que la otra tarde o temprano tendrá que dar en igual instancia.
Deben esas explicaciones, pues no son dos ciudadanos comunes y corrientes. Ambos han recibido por años los honores y las regalías propias de los altos cargos del estado y se han enriquecido con las millonarias remuneraciones que estos proporcionan.
No dan las explicaciones, atacan; los pájaros tirándole a la escopeta.
Novoa ha dicho que el Ministerio Público le ha iniciado un procedimiento investigativo fundado en una supuesta falsedad ideológica. Formula una acusación grave a los fiscales, sorprende la pasividad de ellos ante tamaña acusación. Sin embargo la alegación del dirigente UDI es contradictoria con otro de sus planteamientos, aquel que propone un acuerdo político transversal para dejar todo esto en la impunidad. Si es inocente ¿para qué quiere acuerdo político? Si es inocente ¿porqué se niega a declarar ?, lo que más quiere un inocente es que se escuche su versión, dar sus explicaciones, desmontar la supuesta falsedad de la acusación.
Ha perdido la vergüenza Jovino Novoa.
La señora Bachelet ha criticado que en Chile aparezca una “cultura de desconfianza”. Ella llegó a su alto cargo apoyada por una coalición política a la que los escándalos de corrupción han tocado sensiblemente. El presidente electo de la DC está en ojo de la tormenta. Pero la presidenta no critica la corrupción, critica a los desconfiados, y ¿quiénes somos los desconfiados? Los ciudadanos. Nada explica Bachelet, en cambio crítica a los perjudicados, porque de nosotros es el erario nacional, nosotros la pusimos donde está, somos ciudadanos no súbditos, no lo olviden.
A reglón seguido le pide “responsabilidad” a los medios de prensa. Si la pide es que entiende que ha estando faltando.
En suma, los irresponsables medios de prensa y los desconfiados ciudadanos somos los culpables, no la casta política que recibía los millones a manos llenas, no el hijo de la mandataria que pretendía embolsicarse 2.500 millones en una sola “movida”. Los pájaros tirándole a la escopeta.
Son arrogantes, asimilar una renuncia a un quiebre institucional refleja eso. Una vez una mujer le recetó tortas al pueblo hambiento. La arrogancia no es buena consejera.
La cuarta república iniciada en 1990 ya no da para más. En los hechos nos fue escamoteada la soberanía popular por el diseño institucional pinochetista y la corrupción generalizada de la casta política en su conjunto. Hay que convocar a una Asamblea Constituyente que con una nueva constitución abra paso a la Quinta (V) República. Chile merece ser un país decente.
ROBERTO AVILA TOLEDO