Diciembre 28, 2024

Entrega tu llave, un Monumento para Violeta Parra

La Municipalidad de Recoleta convocó a donar llaves de bronce para levantar una escultura a Violeta Parra, la más destacada folclorista chilena que cambió la música tradicional de los patrones y dueños de haciendas, y le devolvió la voz y raíz popular.

 

La campaña “Entrega tu llave, un Monumento para Violeta Parra”, hace un llamado a donar llaves y otros artículos de bronce, los cuales serán fundidos para dar vida a una escultura.
La iniciativa es impulsada por la Municipalidad de Recoleta, la corporación cultural de la comuna, el Sindicato de Folcloristas y la Fundación Violeta Parra. “Hace mucho tiempo queremos levantar un monumento en honor a Violeta Parra. Al alcalde de Recoleta le gustó la idea así que buscamos un lugar céntrico, popular, donde la gente pueda venir a verla. Escogimos la Plaza de los Historiadores, porque está cerca del Mercado Central y de la Vega. Creo que ubicándola aquí podemos entregársela al pueblo”, dijo Iván Vidal, presidente del Sindicato de Folcloristas de Chile.

La autora de “Gracias a la Vida”, traducido a cientos de idiomas para convertirse en un himno internacional, recorrió los lugares más apartados del país y con su raigambre campesina y un guitarrón comenzó a componer como lo hacían las mujeres del campo.

Nacida en San Fabián de Alico, cerca de Chillán, en 1917, Violeta forma parte de una familia de un profesor primario pobre que dio vida a connotados artistas como el antipoeta y físico Nicanor Parra (que cambió la poesía), hermano mayor de Violeta, y los también folcloristas Roberto, Eduardo e Hilda.

El pasado 5 de febrero se cumplieron 47 años de la muerte de esta mujer definida por Nicanor Parra como “una loba en piel de cordero”, de carácter inmensamente fuerte, marcada por una viruela que le dejó profundas huellas en su cara, voluntariosa, eterna enamorada, sensible y luchadora. Una enfermedad la postró por unos meses en la cama y no se quedó quieta: tomó la aguja y un saco, y tejió inolvidables arpilleras que llegó a exponer en el Museo del Louvre, en París, Francia, en los años 60, siendo la primera latinoamericana en llegar a tan ansiada plaza. Sin embargo, el 5 de febrero de 1967, Violeta dijo basta y en la carpa artística que había levantado en el sector oriente de Santiago, cuando no cumplía aún 50 años, decidió poner fin a su vida y se disparó un balazo en la sien dejando más de 100 canciones que forman parte del patrimonio cultural del país. “Run run se fue p’al norte”, “Qué he sacado con quererte”, “Qué pena siente el alma”, “La Jardinera”, “Volver a los 17”, dedicadas al amor, pero también aquellas que dieron cuenta de las luchas sociales de esos años, como “Me gustan los estudiantes”; “Arriba quemando al sol” dedicada a los mineros; “Arauco tiene una pena” (a los mapuches); “Por qué los pobres no tienen”, “Y qué dirá el Santo Padre” en memoria de Julián Grimao asesinado por las milicias de Franco. Iris Largo Farías recordó a ANSA una de las últimas entrevistas que le hiciera a Violeta su hermano, el folclorista René Largo Farías, creador de uno de los más importantes programas de folclore de la radiotelefonía y del centro folclórico Chile Ríe y Canta.
“El artista debe tener como meta el fundir su trabajo en el contacto directo con el pueblo. Yo estoy muy contenta de haber podido levantar la carpa y trabajar esta vez con elementos vivos, con el público cerquita mío; al cual yo puedo sentir, tocar, hablarlo e incorporarlo a mi alma”, dijo Violeta a René. Se espera que en junio próximo se haya reunido la cantidad suficiente de bronce para poder llevar a cabo este monumento. La idea es inaugurarlo el próximo 4 de octubre, día en que se recuerda el nacimiento de Violeta. Nano Parra, sobrino de la cantautora, valoró el homenaje: “Más vale tarde que nunca, está bien que alguna vez lo hagan.
Creo que es una de las cosas que estaba faltando para doña Violeta, aunque faltan muchas cosas hermosas que se hagan para ella”.
En cuanto a la idea de esculpirla en bronce aportado por la gente, Parra cree que “la gente va a aportar mucho porque doña Violeta es la mujer más querida del folclor”.
“Esto es un anhelo muy antiguo. Queremos que Violeta llegue más al público, a la gente común. Por eso, poner acá un busto es para estar en contacto con ella, así como fue cuando estaba viva”, expresó Víctor Ibarra, integrante del grupo folclórico Santiago Cuatro. “La idea de esta campaña es sensibilizar a la gente, que entreguen sus llaves u otros artefactos de bronce para poder concretar esta iniciativa”, agregó. Jorge Yáñez, actor, escritor, folclorista, coincidió en que es un anhelo de hace largo tiempo.
“Hace 15 años estamos tratando de crear el día de la música nacional, que queremos que sea el 4 de octubre, día del nacimiento de Violeta. Así nació la idea de instalar un monumento popular en algún lugar de nuestro país que sea reconocido por el pueblo chileno”, demandó.

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