El presidente de Bolivia, Evo Morales, comparó el encierro de su país desde 1879 con el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba desde hace más de medio siglo. “Entiendo que el enclaustramiento a Bolivia es como el bloqueo económico a Cuba de parte de Estados Unidos”, dijo durante el desfile cívico-militar por el aniversario 189 de las Fuerzas Armadas y de la independencia de Bolivia.
Tras el triunfo de la Revolución cubana el gobierno estadounidense implantó esa política hostil, la cual -según estimaciones oficiales- ha costado a su pueblo más de un billón 157 mil 327 millones de dólares.
La comunidad internacional ha condenado y exigido el levantamiento inmediato del cerco durante 22 años consecutivos ante la Asamblea General de Naciones Unidas, pero las autoridades de Washington la mantienen vigente.
Morales explicó que Bolivia perdió sus costas en el océano Pacífico en febrero de 1879 por la ambición de empresas transnacionales y la oligarquía chilena, que usurparon 400 kilómetros de litoral y 120 mil kilómetros del nacional mediante una invasión.
“Es una herida que está pendiente de que se repare”, aseveró el gobernante.
Hizo referencia al proceso iniciado con argumentos sólidos ante la Corte Internacional de Justicia para recuperar una salida soberana al mar de manera pacífica.
Pidió al Ejército boliviano prepararse para defender los intereses nacionales cuando se materialice el acceso al mar, al considerar que junto a los movimientos sociales son la garantía para “defender la patria y recuperar los recursos naturales.”
Además, indicó que su Gobierno invertirá en la infraestructura militar, construirá viviendas en las fronteras del país y potenciará la logística de las Fuerzas Armadas con fondos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos.
Morales encabezó la parada militar y de organizaciones indígenas efectuada en esta capital y -en calidad de Capitán General del Ejército- dio la orden de inicio del desfile, que volvió a La Paz luego de recorrer las capitales del resto de los departamentos bolivianos.
A la ceremonia también asistió el vicepresidente Álvaro García Linera, el alto mando militar de Bolivia, miembros del gabinete y candidatos opositores a las elecciones generales de octubre próximo.
La parada incluyó el recorrido de la infantería de todos los cuerpos que integran las Fuerzas Armadas y la condecoración de varios oficiales.