Diciembre 26, 2024

Mahmoud Sarsak, el crack negado

Mahmoud Sarsak tiene apenas 27 años, desde muy joven mostraba condiciones de crack. Jugando para el seleccionado juvenil de Palestina, su carrera se vio interrumpida y afectada por cuestiones extra futbolísticas siendo condenado a años de prisión y torturas por parte del Estado de Israel sin una causa probada. El 10 de Julio de 2012, hace 2 años, Mahmoud Sarsak era liberado después de pasar 3 años en prisión sin motivo y de 3 meses en huelga de hambre denunciando los malos tratos en la prisión y las irregularidades en su condena.

 

 

Mahmoud había jugado dos partidos para el seleccionado de Palestina, contra China y Contra Irak, antes de su detención en el cruce de Eretz, único acceso por tierra a la Franja de Gaza, donde estaba su hogar. De joven tenía como jugadores a quienes admiraba a Zidenine Zidane, Frank Lampard y Alessandro Del Piero, entre otros.

El 22 de junio de 2009 Mahmoud iba camino a Cisjorania donde iba a incorporarse al Markaz Balata, su nuevo equipo, y pese a tener los permisos legales para atravesar el “checkpoint” en el Eretz, el Ejército de Israel lo detuvo acusándolo de formar parte del grupo armado Yihad Islámica Palestina (PIJ) y que supuestamente él había formado parte de la organización de un atentado con una bomba que había lesionado a un soldado israelí. Las acusaciones nunca fueron probadas. De hecho permaneció en prisión sin juicio durante 3 años. Mahmoud fue torturado física y mentalmente durante su detención en esos años. Sarsak fue liberado después de una huelga de hambre de más de 90 días que lo tuvo al borde de la muerte. Durante esos días perdió más de 30 kilos pasando a pesar de 76 a 45kg.

Su caso no fue el único, ya que, por poner un ejemplo, el talentoso delantero de 23 años de un campo de refugiados cercano a Ramallah, Muhammad Nimr, también pasó por prisión. A sus 17 años fue detenido en Belén cuando se dirigía al estado Al-Khader para jugar un partido. Estuvo preso sin condena entre 2007 y 2009. Después de ser liberado, el daño psicológico y la imposibilidad de practicar cualquier deporte durante ese período, lo alejó del seleccionado de Palestina. Hubo más casos similares, por solo mencionar a otros dos ejemplos, como los de Omar Abou Rouis y Mohammed Temer.

En un acto cargado de demagogia, Mahmoud fue invitado a presenciar el “derby” entre Barcelona y Real Madrid disputado el 7 de octubre de 2012, junto con el soldado Israelí Gilad Shalit. La presencia de este soldado Israelí había sido condenada por decenas de organizaciones y clubes de fútbol palestinos, llegando incluso a que autoridades del Barcelona intenten desligarse diciendo que no fue invitado por la institución contradiciendo lo ocurrido. Si bien la imagen de un palestino y un israelí juntos viendo un partido de fútbol podría ser un mensaje de paz, detrás de ella se estarían ocultando muchas de las injusticias y desigualdades que existen en ese conflicto, y que con ver las cifras reales sobre la cantidad de víctimas inocentes de un lado y del otro. En un acto de noble intransigencia Mahmoud Sarsak rechazó la invitación considerando que esta busca ocultar y legitimar la asimetría existente y la opresión cotidiana ejercida por el Ejército de Israel y que de ninguna manera puede aceptar que se le ponga en el mismo lugar a que un asesino. En su respuesta negativa Mahmoud dijo: “Su slogan es un arma, el mío es el fútbol cuyo mensaje es amor y paz, por eso yo me niego a participar”.

 

(ANRED)

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *