La Presidenta, Michelle Bachelet, y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, sostuvieron una reunión en Washington donde abordaron el entorno económico mundial y las políticas que está implementado Chile en esta materia. En la cita, la máxima representante del FMI entregó su respaldo al programa de reformas que está llevando adelante el Gobierno y que tiene como principales cambios los asuntos en materia impositiva y educacional.
“Hemos analizado las prioridades de políticas económicas de Chile en estos ámbitos, incluidos los objetivos del Gobierno para mejorar la progresividad del sistema impositivo, fomentar el acceso equitativo a una educación de calidad y aumentar la participación en la fuerza de trabajo, especialmente de la mujer. El FMI manifestó su apoyo al programa de reformas del Gobierno, y hemos intercambiado opiniones sobre ámbitos en los que podríamos reforzar nuestra colaboración en el futuro”, señalaron en el comunicado conjunto, tras su reunión.
Por su parte, la Jefa de Estado valoró la buena disposición al diálogo de la máxima representante del FMI.
“Hablamos de los cambios estructurales, hablamos de otros desafíos que nuestros países también enfrentan, como energía, como agua, como las compañías, las empresas se manejan con las comunidades y con los problemas sociales. Sobre todo, conversamos sobre la conferencia que vamos a organizar en diciembre, donde tendremos el honor de contar con la presencia de la señora directora gerente y podremos discutir de todos estos temas, sobre todo de este crecimiento inclusivo que todos queremos”, dijo la Mandataria.
Finalmente, la Presidenta destacó la buena recepción que han tenido las reformas del Gobierno durante su Visita Oficial a Estados Unidos.
“Siento que este mensaje, y lo hemos escuchado tanto ayer, conversando en el Banco Mundial y con el Presidente Obama, como hoy en la Cámara de Comercio y con Christine Lagarde, es un mensaje que ha quedado claro, en el cual hemos recibido apoyos importantes. Y me parece que de ninguna manera puede ser percibido como una amenaza. Por el contrario, como un tremendo apoyo al proceso que estamos llevando adelante”, afirmó.