¿Qué pasaría si cada uno de nosotros pudiera solicitar que nuestros datos publicados en la web pudieran ser borrados para siempre? Seguramente muchas personas se evitarían una serie de complicaciones que se generan porque demasiada información está a disposición de todos a un click. Google ha accedido recientemente a esta solicitud elevada por usuarios en la Unión Europea, ejemplo que en Chile está ganando terreno. La semana pasada un grupo de senadores presentó una moción parlamentaria para analizar la materia.
Los senadores Francisco Chahuán, Carlos Bianchi, Hernán Larraín, Baldo Prokurica y Eugenio Tuma presentaron una moción que modifica la ley sobre protección de la vida privada, para establecer el derecho al olvido de los datos personales almacenados en motores de búsqueda y sitios web. La propuesta recientemente ingresada será vista por la Comisión de Economía, la que deberá estudiar las ideas matrices.
A comienzos de mes, unos 12 mil europeos enviaron a Google solicitudes de retiro de enlaces a informaciones personales sólo en el primer día de funcionamiento de este mecanismo que busca garantizar el derecho al olvido en Internet, informó hoy la empresa desde su sede en esta localidad de California. En los momentos de mayor afluencia se registraron hasta 20 peticiones por minuto, explicó la compañía un día después de haber anunciado el acatamiento de una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que favoreció la demanda de un español que planteó el derecho a ser olvidado en la web.
Google puso desde el 1 de junio a disposición de sus usuarios europeos un formulario mediante el cual pueden solicitar que se borren de los resultados de las búsquedas sobre información personal, particularmente cuando son datos sensibles o desfasados.
Los citados legisladores reconocen que es necesario ajustar nuestra legislación a los estándares internacionales. Esto puesto que en mayo pasado, el Tribunal Europeo de Justicia declaró que los ciudadanos de la Unión Europea (UE) tienen derecho a pedir el retiro de información irrelevante o bochornosa que apareciera al buscar su nombre.
Los congresistas en la comisión, reconocen que la norma en vigencia solo hace alusión al tratamiento que hacen los registros o bancos de datos. “Sin embargo no se contempla este mismo derecho para eliminar los datos que se contengan en motores de búsqueda o sitios web”.
En lo práctico, el texto admite que este cambio será especialmente relevante en el caso de que “una persona sea vinculada a una conducta delictual, publicándose su nombre en diversos medios de prensa, y posteriormente se compruebe su inocencia”.