Luego de ocho años de mantener bajo secreto las 39 mil fichas incautadas en la ex Colonia Dignidad, el juez Jorge Zepeda ha entregado este archivo con informaciones sobre la represión dictatorial y crímenes de lesa humanidad cometidos por la DINA y personal del propio predio alemán, al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) y copia al Consejo de Defensa del Estado (CDE).
Londres 38, espacio de memorias, ha informado, sin embargo, que mantendrá su campaña No Más Archivos Secretos hasta conseguir la apertura total y sin restricciones de aquellos conjuntos de archivos con información sobre la represión de la dictadura cívico militar.
La sola entrega del archivo a estos organismos del Estado es un paso importante para conseguir más verdad y justicia sobre los crímenes, señala la organización en un comunicado, “pues mientras se han mantenido en secreto solo han facilitado la impunidad, al punto que ningún personero de la ex Colonia Dignidad ha sido juzgado por los crímenes políticos que se cometieron en ese lugar que funcionó como apéndice de la DINA y que fue usado como un centro de detención, tortura y exterminio”.
No hay razones ni excusas para haber mantenido bajo secreto durante ocho años estos documentos que registran los delitos de una organización criminal, agrega la declaración. “Tampoco hay razones para que los organismos del Estado que hoy tienen el conjunto de los documentos (las 39 mil fichas) no adopten medidas rápidas y transparentes para facilitar el libre acceso de la ciudadanía y sus organizaciones a esta información”.
Asimismo, dice que el juez que tenía este archivo entregó hace una semana a las organizaciones de derechos humanos y sitios de memoria 407 fichas con informaciones a detenidos desaparecidos. Esa información es parcial y de reducida utilidad, toda vez que no se puede analizar en su contexto y porque además es posible constatar que hay otros conjuntos de archivos relacionados a este incautado en 2005.