El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, advirtió hoy que si se comprueba que los militares que integran una red de inteligencia realizaron espionaje ilegal, como lo denunció una revista, se deben aplicar las sanciones de rigor.
La revelación del espionaje fue hecha a comienzos de este mes por la revista “Semana”, que aseguró que al menos tres miembros del equipo negociador del gobierno en el proceso de paz con la guerrilla de las FARC, que se cumple en Cuba, fueron espiados por militares.
Según la investigación de la revista, la interceptación de correos electrónicos fue hecha por una unidad de inteligencia militar que usó como fachada un restaurante y un centro de informática que funcionaban en un sector comercial de Bogotá.
En su primera reacción ante la denuncia, Santos dijo que el caso puede obedecer a “fuerzas oscuras” que supuestamente pretenden sabotear las negociaciones, aunque luego matizó sus palabras cuando el Ejército le confirmó que desde esa fachada se realizaban tareas encubiertas, aunque sin efectuar un espionaje ilegal.
El mandatario, al intervenir hoy en una ceremonia militar, dijo que las autoridades deben investigar lo que se estaba haciendo desde ese lugar, que a finales de enero fue registrado por la Fiscalía General, y que se aplicarán sanciones si se comprueba alguna irregularidad.
“La inteligencia es fundamental para la seguridad de cualquier país. Es una obligación para cualquier gobierno, para cualquier Estado, pero dentro de lo que permiten la Constitución y las leyes (…) Si descubrimos que se ha hecho un uso indebido de ese derecho seremos, como hemos sido en el pasado, absolutamente tajantes y contundentes en la aplicación de las sanciones respectivas”, afirmó.
Asimismo, el jefe de Estado pidió este jueves a la Procuraduría General (Ministerio Público) investigar disciplinariamente a los uniformados que estarían involucrados en el escándalo para determinar si hubo “abusos” por parte de la inteligencia militar.
“Si descubrimos que hubo uso indebido en el uso de ese derecho (el de hacer inteligencia) seremos, como hemos sido en el pasado tajantes y contundentes en las sanciones respectivas”, advirtió el mandatario.
El director de “Semana”, Alejandro Santos, quien es sobrino del jefe de Estado, asegura que tiene pruebas que publicará en su momento sobre dicho espionaje.
El periodista dijo que tiene las pruebas del espionaje contra Humberto de la Calle, Sergio Jaramillo y Alejandro der, integrantes del equipo negociador del gobierno ante las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), pero que las publicará cuando sea oportuno, como medida de seguridad para la revista y sus fuentes.
El gobierno relevó de sus cargos a los principales jefes de la inteligencia militar, los generales Mauricio Zúñiga y Jorge Zuluaga, horas después de ser publicada la denuncia de “Semana”.
Luciano Marín, alias “Iván Márquez”, el jefe de la delegación de las FARC en Cuba, dijo después que el espionaje no solo afectó a los integrantes del equipo del gobierno, sino también a los portavoces de la guerrilla.
El canal estadounidense Univisión señaló el pasado fin de semana que varios periodistas colombianos y extranjeros en La Habana también fueron espiados por la inteligencia militar colombiana.