Estados Unidos da la prioridad a la solución política de la crisis siria pero tampoco descarta una intervención militar, declaró el presidente estadounidense, Barack Obama, en una rueda de prensa conjunta con su homólogo francés, François Hollande.
“Por el momento no pensamos que la intervención militar resuelva el problema. Pero la situación es variable y continuaremos estudiando cualquier solución posible no solo porque es desgarrador lo que está sucediendo al pueblo sirio sino también porque es muy peligroso para toda la región”.
Obama recalcó que todas las armas químicas deben sacarse fuera de Siria y advirtió que habrá consecuencias en caso de que los esfuerzos para cumplir con ese mandato de la ONU se verán frustrados.
El mandatario estadounidense afirmó que Rusia debe contribuir a la adopción en el Consejo de Seguridad de la ONU de una resolución sobre la situación humanitaria en Siria.
“Tenemos una horrenda situación sobre el terreno en Siria”, indicó al añadir que “no son sólo los sirios los responsables, los rusos también (lo serán) si bloquean este tipo de resolución”.
Varios países elaboraron un proyecto de resolución que exige un mejoramiento de la situación humanitaria en Siria en 15 días bajo amenaza de sanciones. El embajador ruso ante Naciones Unidas, Vitali Churkin, ya declaró que ese documento podría minar los esfuerzos que se hacen para suministrar ayuda humanitaria y señaló que Rusia lo vetará.
La situación en torno a la asistencia a la población siria, en particular, en Homs, es uno de los problemas clave de las negociaciones en Ginebra. La evacuación de los habitantes de la ciudad comenzó el 7 de febrero después de que se firmara una tregua de tres días. En cuatro días más de 1.000 personas abandonaron la ciudad y 2.500 recibieron ayuda alimentaria.