Hasta que la sangre llegó al río. Nadie esperaba que alguna amenaza de renuncia en el ámbito parlamentario, aparte de la del senador Antonio Horvath, se concretara en Renovación Nacional. Pero aun cuando no se han formalizado, el desangramiento comunicacional en la casona de Antonio Varas ya comenzó.
A través de una extensa declaración pública, los diputados Karla Rubilar, Pedro Browne y Joaquín Godoy confirmaron su decisión de dejar las filas de la tienda con el fin de “formar un nuevo partido político que proyecte nuestras ideas y contribuya a la amplitud de la Alianza por Chile y al futuro del país”, tal como lo había adelantado El Mostrador. Así, tal como era de esperar, el Consejo Nacional del 18 de enero próximo podría sorprender al partido con uno de los cismas más importantes que enfrenta la colectividad en su existencia. Por lo mismo, pese a que la mesa encabezada por Carlos Larraín Peña ha intentado mantener la calma, en la tienda existe preocupación, porque no es bueno terminar una larga secuencia de gestiones con la fuga de parlamentarios. Menos cuando los máximos dirigentes de RN se han solazado con el triunfo obtenido en el área legislativa. Sumando y restando, el controvertido presidente de la colectividad pasa por su momento de mayor debilidad política desde que asumió con mano firme la conducción del partido por primera vez el año 2006, en reemplazo de Sergio Díez.
En la mencionada declaración pública, los renunciados diputados hacen una apuesta doctrinaría con la que, estiman, pueden representar a una centro derecha liberal, ofreciéndole a su sector un nuevo espacio de participación para atraer y reconquistar al electorado perdido. “Hoy es el momento de formar un nuevo partido político que proyecte nuestras ideas y contribuya a la amplitud de la Alianza por Chile y al futuro del país. Nuestro tiempo en Renovación Nacional se ha agotado y el espacio para nuestras ideas ya no es viable dentro del partido que nos acogió”, son las primeras frases del documento titulado “Amplitud” y que es suscrito por los tres parlamentarios.
“Hoy partimos un nuevo movimiento político que tiene por fin inmediato lograr la unidad de todos los independientes de centro y de derecha que no se sienten representados por los partidos actuales. También hacemos un llamado a Evópoli y a todas las organizaciones sociales que concuerden con nuestros planteamientos, a que juntos formemos un nuevo partido dentro de la Alianza por Chile. Este esfuerzo requiere dejar atrás los caudillismos y también los discursos oportunistas. Aspiramos a participar con un candidato de nuestro partido en las primarias presidenciales de la Alianza por Chile el año 2017 y de esta forma llevar por primera vez a alguien de nuestra generación política a la Presidencia de la República”, con lo que se echan por tierra las especulaciones de quienes, desde RN, calculan que este nuevo referente sería la plataforma política para la candidatura de Sebastián Piñera el 2017.
Además establece el lineamiento doctrinario por el cual se regirán, destacando ideas como que “el liberalismo es mucho más que un mecanismo económico con fines desarrollistas. El liberalismo es una opción política cuyo fin es defender las libertades individuales, cuestión que no es antagónica con creer en un Estado capaz y funcional. Estas ideas no son nuevas en Chile. Lo que hoy llamamos centro-derecha fue a lo largo del siglo XX una fiel defensora de la democracia representativa y de la progresiva liberalización de las costumbres. La dictadura militar interrumpió este proceso que hoy retomamos con fuerza”.
Asimismo, rechazan el golpe de Estado, negándose a “justificar los atroces crímenes y atropellos”; asumen como propias las reformas constitucionales “dentro de la institucionalidad”; hablan de “justicia y fortalecimiento de la sociedad civil” y añaden que “soñamos con un partido preocupado de lo público que ofrezca respuestas de centroderecha, no sólo basadas en la defensa del mercado, a los temas de dimensión pública tales como el desarrollo de las ciudades, la educación, la previsión, la salud, la discapacidad, la protección del medioambiente, la investigación científica y la descentralización”. Mientras que la diputada Rubilar, en entrevista que la noche del lunes concedió a CNN Chile, reiteró que “desde mañana vamos a conversar con Evópoli para ver si podemos construir el tercer partido de la Alianza”.
Efecto en RN
Pero si se llegó a este límite es porque, según se comenta en el mundo liberal de RN, “existe un diagnóstico compartido entre ministros, parlamentarios y dirigentes (del sector) que lo que está haciendo hoy la directiva es puro maquillaje”, en alusión a la determinación de la mesa de convocar al Consejo General para revisar la declaración de principios del partido, sobre todo si se considera que el sector más progresista de la tienda, liderado por figuras como la senadora Lily Pérez, desde hace años viene planteando la necesidad de realizar dichos cambios. De allí que entre quienes están evaluando continuar el camino que adoptaron este grupo de diputados, estiman que la sorpresiva convocatoria a la instancia resolutiva y el establecimiento de la fecha para las elecciones internas, “no son más que una reacción tardía para evitar que más gente se siga yendo del partido”. Pero “nadie cree que esto vaya a tener un resultado concreto. Capaz que después de este episodio no pase nada más”.
Estas especulaciones dan cuenta de la incredulidad con que un sector de la tienda ha recibido las modernizaciones que Larraín pretende realizar al partido, secundando el ideario de Andrés Allamand, y de la improvisación con que habría actuado la mesa para frenar la fuga. Al punto que, en alrededor de 24 horas, los consejeros han recibido tres correos electrónicos para aclarar diferentes puntos relacionados con la convocatoria al Consejo General Doctrinario. El primero hacía la invitación con fecha 26 y 27 de abril; el segundo, adelantó la misma al 5 y 6 de abril; y, por último, un tercero que circuló este martes pasadas las 18 horas hacía una serie de precisiones relacionadas a la declaración de principios que se pretende modificar. Como, por ejemplo, que “la idea es que (esta instancia) sea la culminación de un proceso de la mayor amplitud posible. Por esta razón, les solicito a todos ustedes que hagan llegar las propuestas de actualización o cambio doctrinario a los consejeros generales de su distrito, para que sean ellos los que los lleven a nuestra máxima instancia, como asimismo, les solicitamos a las directivas comunales, distritales y regionales que realicen consejos donde se aborde de manera exclusiva este importante tema”, con el evidente fin de apuntar hacia una mayor participación.
Pero también menciona que “esta convocatoria encierra un enorme desafío para Renovación. La declaración de principios es el marco en el que se encuadra toda la labor política que cada uno de sus militantes desarrolla, por lo que debe ser un documento ampliamente aceptado, y sobre todo lealmente acatado. El actual marco doctrinario data de hace más de 25 años, y si bien es cierto que nuestro partido no es de aquellos que guía sus pasos atendiendo a la encuesta del día, también es cierto que este tipo de documentos no son inmutables, y pueden ser actualizados”.
Don Carlos admite que está preocupado, porque todos los partidos “quieren crecer, no achicarse”, pero paralelamente no logra entender –explican en su entorno– que con todo lo que ha hecho estos días, que parece ir en la línea que vienen exigiendo los liberales del partido desde hace mucho, cuando él inició su largo período de ocho años, el sector crítico de su gestión igualmente decida partir y, poco a poco, vaya dejando las filas de un partido que no sólo los acogió, sino que les permitió ocupar los cargos públicos que ostentan en la actualidad. Aunque estaba reacio a hablar y había designado a un vocero oficial que diera la postura de la directiva frente a las renuncias, al final cedió, asegurando que lo sucedido “no es nuevo para mí”. Incluso sacó a colación la incertidumbre en que Sebastián Piñera tiene a la colectividad al no confirmar si vuelve o no, advirtiendo que “esto moriría abruptamente si el Presidente confirmara su intención de volver a Renovación Nacional”.
Por otra parte, el mensaje que les envió tanto a los diputados que anoche confirmaron su renuncia, a través de una declaración pública, como a quienes evalúan seguir su ejemplo, es que “la manera de decidir el futuro de Renovación Nacional es votando en la elección interna”, fijada para fines de mayo. Y expresó su molestia, recordando que los legisladores que se van y los que podrían hacerlo “se eligieron con los votos de Renovación Nacional hace menos de 60 días”, lo que para algunos en la tienda es considerado “una verdadera deslealtad”.
En la misma línea de Larraín se pronunció el senador electo por Santiago Oriente Manuel José Ossandón, quien a través de su cuenta de Twitter dijo este lunes por la noche que “era mejor q @pedrobrowneu, @KarlaEnAccion y @Joacogodoy se hubieran ido antes de RN y juntaran firmas para presentarse como independientes”. Por otra parte, a Larraín le preocupa que a estas alturas comience a proliferar la creación de pequeños partidos que finalmente impidan un acuerdo para modificar el binominal, porque aspirarán a cambiar totalmente el sistema. Por otra parte, en el entorno de los diputados que renunciaron aseguran que la decisión estaba tomada hace, al menos, un mes, a la espera del momento oportuno para hacerla pública. En el intertanto, el aspirante a presidir RN, diputado Cristián Monckeberg, hacía todas las gestiones posibles para evitar la fuga, algo que no habría conseguido, pues se estima que aún hay renuncias por venir.