En el sector de Cunlagua y San Agustín del valle de Chalinga en la comuna de Salamanca, se ha generado un foco de incendio forestal en la rivera del río Chalinga. El incendio comenzó a partir de las 20:00 hrs. del día 1º de enero y no se ha podido controlar hasta ayer, ya que los focos vuelven a renacer por el intenso calor y condiciones del sector.
Bomberos de la comuna de Salamanca, se vieron sobrepasados, aunque llegaron compañías de bomberos de toda la provincia del Choapa a ayudar en el control de la catástrofe, decretándose alerta amarilla en el sector el día 2 de enero, por parte de la autoridad.
Antonio Flores, Primer Comandante de Bomberos de Salamanca declaró que: “Conaf se retiró aunque son pagados, claro que hemos tenido harta colaboración de ellos”.
Rodolfo Zúñiga, Gobernador del Choapa, por su parte dijo: “No me gustaron los protocolos de Conaf, no puede ser que se vayan a las nueve de la noche cuando el incendio se mantiene con gran intensidad”.
Es importante destacar que lo que hace Conaf, a pesar de ser establecido por protocolo no es lo más adecuado, ya que no puede ser que se retiren del foco del incendio y queden los bomberos solos resguardando la población, puesto que ellos son voluntarios y Conaf un servicio pagado por toda la ciudadanía.
El caso es que el incendio aún se encuentra activo afectando una superficie aproximada de 20 hectáreas de pastizal, matorral y arbolado nativo. El Gobernador del Choapa, Rodolfo Zúñiga Salinas a través de la radio San Francisco de Salamanca, declaró que “mañana a primera hora sobrevolará un avión para bombardear las 7 u 8 hectáreas ya afectadas”. A pesar del compromiso de las autoridades, esto nunca ocurrió y si bien, durante la madrugada fueron controlados los focos de incendio, durante la tarde del 3 de enero nuevamente se reactivaron.
Ayer por la tarde, se hizo presente un helicóptero lanza aguas que debió contratar el municipio local tras la negativa de Conaf, que fue fundamental, no sólo para llegar a lugares de difícil acceso para las unidades bomberiles, sino también, dio la tranquilidad a la población de San Agustín, que desde el pasado 1 de enero, sufre las consecuencias del fuego.