Los vínculos entre Agustín Edwards y dos ex agentes de la DINE implicados en seguimientos a Eduardo Frei Montalva y condenados por el asesinato del ex químico de la DINA Eugenio Berríos, explicarían el por qué El Mercurio oculta informaciones sobre el Magnicidio del ex presidente padre del actual senador. Carmen Frei a Cambio21: “El Mercurio ha tratado que estos graves hechos no se publiquen”
Ni el novelista más prolífico podría haberse imaginado las intrigas que durante décadas se fraguaron en nuestro país, que permitieron el golpe de Estado y ampararon las violaciones a los derechos humanos de una dictadura que se prolongó por 17 años.
A través de sus aparatos de inteligencia, el general Pinochet llevó a cabo un plan de exterminio sistemático de los principales líderes políticos y sociales, entre estos el magnicidio del presidente Eduardo Frei Montalva, quien falleció en enero de 1982 a través de la técnica del envenenamiento y el líder sindical Tucapel Jiménez, encontrado degollado en su taxi sólo días después, el 25 de febrero del mismo año.
Para no dejar huellas, las intrincadas redes de este macabro aparato alcanzaron hasta a sus propios aliados, como es el caso del crimen del químico de la DINA, Eugenio Berríos, que empleó el peligroso gas Sarín y otras sustancias venenosas con las que fue asesinado el Presidente Frei.
Las investigaciones en torno a los asesinatos de Tucapel Jiménez, Eugenio Berríos y Eduardo Frei Montalva, han arrojado nombres que se repiten, entre estos los altos mandos de la DINE, general (r) Eugenio Covarrubias Valenzuela y el Mayor (r) Arturo Silva Valdés, condenados como autores del crimen del ex agente Berríos, ocurrido en Uruguay.
Ambos ostentan en su currículum haber sido jefes de la escolta personal del general Augusto Pinochet, y que – estando en servicio activo en el Ejército – hicieron seguimientos al ex presidente Eduardo Frei y formaron parte de la plana directiva de Serprotec S.A, empresa de seguridad constituida por escritura publicada en el Diario Oficial el 18 de agosto de 1992, y cuyos socios son Juan Luis Armando Herrera Villena e Inversiones Canelo Seis y Cía., esta última propiedad de Agustín Edwards Eastman y la Compañía de Inversiones Samotracia.
Los antecedentes
El año 2011 se editó el libro “Magnicidio. Asesinato del Presidente Eduardo Frei Montalva”, escrito por el periodista Benedicto Castillo, donde se develan todas las oscuras maniobras que rodearon la muerte del ex mandatario.
El periodista recopiló antecedentes que confirman la estrecha relación que durante años mantuvieron el empresario dueño del consorcio periodístico El Mercurio S.A.P. y estos ex agentes de la DINE.
En conversación con Cambio21 el autor señaló que en su investigación de más de tres años no descubrió nexos entre El Mercurio y la operación para la eliminación del mandatario, “no obstante arroja que Agustín Edwards, después del secuestro de su hijo, creó una empresa de seguridad (Serprotec S.A) donde puso a cargo a estos altos agentes de la DINE”.
Explicó que “tanto el general Eugenio Covarrubias como Arturo Silva Valdés están implicados en muchas causas de derechos humanos, entre las que se enmarca el crimen de Berrios, fabricante de químicos letales para llevar a cabo la operación para asesinar a Frei. A cualquiera que lea los datos y analice los documentos, le queda claro que si Edwards crea una empresa que es dirigida por dos importantes agentes de inteligencia vinculados a violaciones a los derechos humanos, no tendría interés en publicar antecedentes que hablen mal de dos importantes de sus colaboradores”.
Detalló que “el mayor Arturo Silva Valdés fue jefe de la llamada Unidad de Bajas del Ejército, a través de la cual la DINE buscaba sacar del país a los principales agentes que estaban involucrados en los más horrendos asesinatos – como Eugenio Berrios – a quien la justicia buscaba para esclarecer crímenes tan importantes como el de Frei Montalva”.
La cercanía de ambos condenados con El Mercurio, queda ratificada con otros antecedentes publicados en el libro de Castillo, entre los que destaca que el general Covarrubias puso como gerente general de Serprotec S.A., a su hijo mayor.
Agregó que “a esto se suma que ambos trabajaban mediodía en la DINE y mediodía en la empresa de Edwards, lo que además de ser algo extraño es claramente un acto de corrupción porque un militar que está en servicio activo no puede
trabajar en un servicio privado, porque rompe con las normas del ejercicio público de la profesión”.
Un continuo
Otro que conoce el actuar de El Mercurio en el tratamiento de estas causas, es el investigador Fernando Villagrán, autor de “El Diario de Agustín”, obra que relata el rol que jugó este medio de comunicación durante la dictadura.
En diálogo con Cambio21 dijo que este no es un hecho aislado: “La vinculación de Agustín Edwards con los servicios de seguridad de la dictadura marcan un continuo desde los primeros días del gobierno de Pinochet y se prolongan en el tiempo post dictadura, por lo tanto no es extraño que vayan apareciendo episodios donde aparezca esta directa vinculación”.
Agregó que “uno puede hacer un seguimiento de montajes que han involucrado al diario o directamente a Agustín Edwards, propiciando acciones de montaje para encubrir los crímenes e invisibilizar a sus hechores. Entonces, que en su guardia pretoriana estén personajes vinculados posteriormente a graves crímenes de derechos humanos, como los asesinos de Berrios y conspiradores del magnicidio, forma parte de una política, no es un hecho aislado ni una casualidad y seguramente nuevas investigaciones que surjan van a confirmar esta concomitancia entre Edwards y los organismos represivos de la dictadura”.
Benedicto Castillo señaló que no “cabe duda con el paso de tiempo – y como lo indican distintas investigaciones – de estos vínculos de El Mercurio, porque Agustín Edwards si no era miembro, era íntimo amigo del director de la CIA y hay documentos desclasificados que certifican que de los dineros que envío la CIA para los conspiradores, parte cayó en sus bolsillos. Entonces de lo que no cabe duda es que está vinculado al golpe de Estado”.
Insistió en que “todos estos antecedentes son reales y que no estamos hablando de novelas, sino de datos serios y comprobados a través de diversas investigaciones, los que sólo basta juntar para confirmar sin lugar a dudas que se relacionaba primero con la CIA previo y durante el golpe de estado y luego con la DINE, entre los años 1992 y 1995”.
El futuro
Los investigadores coinciden en que a pesar del paso del tiempo y de los antecedentes concretos, Edwards seguirá negando estos vínculos.
Al respecto, Benedicto Castillo dijo que “no sabemos si todavía constituye un lazo, porque nunca ha sido lo suficientemente honesto para reconocer que fue agente de la CIA y que apoyó el golpe de Estado, por lo que menos va a reconocer sus vínculos con agentes del estados violadores a los Derechos Humanos, pero si es irrefutable que creó esta empresa donde trabajaron agentes del servicio de inteligencia del Ejército durante varios años”.
Por su parte Villagrán se mostró desesperanzado de un cambio de actitud: “Ha quedado demostrado en sus declaraciones ante el ministro Carroza, donde negó con todo descaro haber recibido recursos financieros de la CIA, cuando esto está certificado y confirmado por la propia CIA”.
Consideró que “tal como lo hizo Pinochet, Edwards apuesta al olvido y a su edad, para no recordar en qué estuvo involucrado, pero yo veo que en el contexto que vive hoy el país – donde cada día es más evidente hasta adonde llegó la acción directa y criminal de la dictadura – que la defensa de Edwards está cada vez más debilitada y que la propia opinión pública se puede dar cuenta de cómo entregan información sesgada y parcial, como es el caso del crimen de Frei donde ocultan los vínculos de Edwards con miembros de organizaciones criminales”.
Concluyó señalando que “la vía de invisibilizar ha sido la política histórica de El Mercurio” y que “habrá que seguirle la pista a cómo responde a estas revelaciones que está haciendo Cambio21 respecto a su tratamiento del crimen del presidente Frei”.
Carmen Frei en Cambio21: El Mercurio ha tratado que estos graves hechos no se publiquen
Más allá de referirse puntualmente a las vinculaciones del dueño de El Mercurio con agentes de la DINE involucrados en el magnicidio de su padre, la ex senadora Carmen Frei afirmó que “El Mercurio ha sido siempre muy parco en sus noticias y muchas veces ha acogido declaraciones de personas que trataban de desprestigiar la causa de la muerte de mi padre, y en ese sentido yo siento que El Mercurio al igual que en otras muchas causas de derechos humanos, no ha informado con veracidad, ha tratado ha tratado que estos graves hechos no se publiquen y si lo hace lo ha hecho en forma muy pequeña”.
En conversación con Cambio21 consideró que “El Mercurio, siendo un diario tan importante en nuestro país, podría tener una actitud de realmente informar y acoger más las causas de derechos humanos, pero lamentablemente históricamente ha hecho lo contrario, los disminuye y no les da la cabida que uno esperaría de un medio como El Mercurio, de circulación e importancia nacional”.
Destacó que “ahora que la gente está muy informada del crimen de mi papá a través de otros medios, sabe perfectamente que fue asesinado y en ese sentido como familia agradecemos los distintos reportajes, libros e investigaciones que a lo largo de estos años han ratificado lo que yo denuncié. En ese sentido El Mercurio ha cometido un error con la información respecto al homicidio, porque han tratado de tapar el sol con un dedo”.
Carmen Frei dijo que “esperaría que un medio tan importante de nuestro país informara con más detalle y sobre todo acogiera las noticias, porque muchas veces pasan desapercibidas”.
Descartó que pudiese haber afectado de alguna manera las investigaciones de las causas de derechos humanos y estimó que a pesar del paso del tiempo, se logrará esclarecer toda la verdad. “tengo la absoluta y plana confianza en los jueces que llevan las causas de DDHH y especialmente del juez Madrid que está investigando el caso de mi padre”, concluyó.
Álvaro Varela, abogado de Derechos Humanos: El Mercurio cercena la información del caso Frei
A juicio de Álvaro Varela, quien fuera abogado de la familia Frei, “más allá de que El Mercurio por regla general no informa sobre esta materia o bien la tergiversa como históricamente lo ha hecho, en la práctica se ha demostrado que esto sería incluso parte de una política del periódico.
Recordó que “esto fue particularmente intenso cuando el juez a cargo de la causa sometió a proceso a seis personas y ahí realmente el diario se dedicó con mucha intensidad y profusión a desvirtuar las resoluciones del ministro Madrid y tratar de desacreditarlas”.
Consultado por Cambio21 señaló que la vinculación de dueño de El Mercurio con dos agentes de la DINE realmente cercena la información que debería dar, porque se trata de personal que estuvo directamente involucrado en el crimen de Berríos y que prestó servicio para la alta dirección de El Mercurio durante un periodo de tiempo estando en servicio activo en la DINE.
Agregó que “de frentón es absolutamente claro que El Mercurio no informa y cuando lo tiene que hacer entrega información sesgada e incluso distorsionada. Esto de extrema gravedad”, reflexionó.
“Realmente uno de los hechos que sorprendió en el crimen de Berríos fue que sus principales ejecutores habían sido parte del equipo de protección del dueño de El Mercurio”, concluyó.
Los millones
Durante este periodo el Mayor Arturo Rodrigo Silva Valdés también se hizo millonario. Así queda en manifiesto en el capítulo 37 del libro de Benedicto Castillo:
“La BRILAC recibió del Departamento de Remuneraciones del Ejército de Chile un cuadro con los sueldos pagados al mayor Silva desde 1990 a 1995, totalizando un ingreso de $3.088.374. Sin embargo, los siguientes antecedentes son sorprendentemente ilustrativos de cómo se movió este oficial en el ámbito financiero y bancario”, señala el libro, que da cuenta de 6 depósitos bancarios y tres cuentas corrientes millonarias en ese periodo.
Otro párrafo destacado señala que: “Según informe de la Tesorería General de la República, este militar hizo declaraciones tributarias los años 1997, 1998 y 1999. Tomando 1997, declaró ingresos anuales provenientes de sueldos y pensiones conforme al siguiente detalle: Pensión de la Caja de Previsión de la Defensa Nacional: $3.691,106; Sueldo de la empresa Serprotec S.A. (de propiedad de Agustín Edwards Eastmann) por $48.806.041. En los años tributarios 2000, 2001 y 2002 declaró ingresos anuales por $21.013.302, $10.399.404 y $13.120.503, respectivamente”.
Las condenas de los encargados de seguridad de Edwards en el caso Berríos
El general (r) Eugenio Covarrubias Valenzuela, fue condenado a 10 años y un día por su responsabilidad como autor del delito de secuestro; 5 años y 1 día por asociación ilícita.
El mayor (r) Arturo Silva Valdés, fue condenado a una pena efectiva de 15 años y un día por su responsabilidad como autor del delito de secuestro con homicidio y 5 años y un día por asociación ilícita.
Más antecedentes en http://magnicidioeduardofrei.blogspot.com/