Ayer se dio inicio al juicio oral a Daniel Melinao, werkén de la comunidad Wente Winkul Mapu y preso político mapuche, quién lleva ocho meses recluido en la cárcel de Ángol. Este año, el fiscal Luis Chamorro imputó de “coautoría” a Melinao en la muerte del sargento del GOPE Hugo Albornoz, en un violento allanamiento a la comunidad realizado en el 2012.
“No tengo ninguna participación en los hechos que se me están acusando”, dijo Melinao, asegurando que “todo esto obedece a un montaje político en mi contra por mi condición de dirigente mapuche, por ser el werkén de mi comunidad”, publicó SoyChile a inicio de este mes. El mapuche podría recibir una condena de 20 años por homicidio calificado de funcionario policial.
Las pruebas contra Melinao es la triangulación de su teléfono celular, que lo ubicaría en la comunidad, o cerca de ella, en la hora y lugar de los hechos. La Misión Mapuche de la Compañía de Jesús de Tirúa denuncia que la detención del werkén de Wente Winkul Mapu se da en un contexto más amplio de decisiones políticas sobre las demandas del movimiento mapuche.
Fueron alrededor de 800 personas, quienes caminaron hasta el Tribunal Oral en lo Penal de Ángol al mediodía durante la manifestación pacífica en apoyo al werkén. Sin embargo, un fuerte contingente de Fuerzas Especiales intentó dispersar la manifestación con carros lanza aguas y zorrillos. 16 personas, incluyendo un sacerdote jesuita, fueron detenidas.
Según lo informado por el sacerdote jesuita Luis García Huidobro, entre los detenidos se encontraba una mujer que marchaba en compañía de una niña con síndrome de down. Esa misma tarde, el sacerdote fue liberado “por el apellido y la institución (la Iglesia). Racismo puro, quedaron presos todos los peñi”, explicó. Los otros 15 mapuche detenidos vieron su derecho de entrevista con abogado de los mapuche vulnerado. “El mensaje de carabineros fue claro: la cárcel es para los mapuche” agregó.
Daniel Melinao informó desde un comunicado escrito en la cárcel que “no confiamos en la justicia chilena pues constantemente hemos visto que hermanos mapuche son condenados sin pruebas en los tribunales racistas, especialmente al mando del fiscal antimapuche Luis Chamorro, y con mentiras de funcionarios policiales pagados por defender los intereses de los grandes empresarios”
“Esperando que todo salga bien en el juicio iniciado hoy, espero demostrar mi inocencia y sigo resistiendo tras 8 meses de injustificado encierro” agregó. Concluyó con un llamado de solidaridad con los otros presos políticos recluidos en la cárcel de Ángol a todo el Pueblo-Nación Mapuche a seguir movilizándose por controlar su territorio ancestral y defender a su Ñuke Mapu de la explotación capitalista.
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