Dos agentes del Departamento A-2 de Inteligencia de la Armada, fueron acusados por el juez Mario Carroza Espinosa como autores del homicidio del dirigente socialista Arnoldo Camú Veloso. El magistrado sometió a proceso a Alejandro Guillermo Carrasco Flores y José Ismael Pezo Lagos, ex funcionarios de la Armada, como autores del crimen cometido el 24 de septiembre de 1973.
El abogado Arnoldo Camú, miembro de la dirección del Partido Socialista, fue detenido en la calle y ejecutado al interior del vehículo en que era trasladado a un recinto de la Inteligencia Naval para someterlo a interrogatorio. La investigación del juez Carroza determinó que los agentes de la Armada recibieron información que ese día Arnoldo Camú se reuniría con otra persona en la calle Santiaguillo. El dirigente socialista, había pasado a la clandestinidad y era intensamente buscado por la dictadura.
Camú era jefe de la Comisión de Defensa -conocida como el “aparato armado”- del PS. Antes de incorporarse en 1970 a la comisión política de su partido, Camú había sido jefe de la sección chilena del Ejército de Liberación Nacional (ELN) fundado por el Comandante Ernesto Che Guevara en Bolivia. El ELN chileno se disolvió cuando Salvador Allende ganó la Presidencia de la República. Al momento de ser detenido y asesinado, Camú y otros miembros de la dirección clandestina del PS intentaban retomar contactos con militantes y reorganizar algunas estructuras partidarias.
La información que recibió la Inteligencia Naval acerca del paradero de Camú permitió enviar una patrulla a capturarlo. La integraban los sargentos Germán Melo Pastor, José Ismael Pezo Lagos y el cabo Alejandro Carrasco Flores. Esa mañana, efectivamente, Arnoldo Camú llegó al punto de contacto con el militante Ernesto Gutiérrez Zegarra. Después de intercambiar algunas informaciones, se dieron cuenta que estaban siendo vigilados e intentaron huir. Sin embargo fueron capturados, golpeados y amarrados con una soga. Los subieron a la parte trasera de su vehículo y emprendieron el regreso a la unidad.
La investigación del juez Mario Carroza señala que cuando el vehículo de la Inteligencia Naval transitaba por la calle Amunátegui, en dirección al norte, entre Huérfanos y Compañía, Arnoldo Camú logró sacarse la soga que le ataba las manos e intentó abrir la puerta para escapar. Pero el agente que iba en el asiento del copiloto se dio cuenta de sus movimientos y le disparó tres tiros, hiriéndolo en el abdomen. No obstante la gravedad de las heridas de Camú, los agentes decidieron llevar primero hasta su cuartel al otro detenido, Ernesto Gutiérrez, y luego trasladar a Camú a la Posta Central, donde ingresó fallecido.
Como resultado de la investigación y de las numerosas declaraciones recogidas en el expediente judicial, el tribunal concluyó que los ex agentes Alejandro Guillermo Carrasco Flores y José Ismael Pezo Lagos eran autores del delito de homicidio en la persona de Arnoldo Camú, ordenando procesarlos.
Ahora comienza la etapa final de este caso. Las organizaciones de derechos humanos y los familiares de la víctima esperan que el proceso concluya con condenas ejemplares a los culpables
Publicado en “Punto Final”, edición Nº 794, 22 de noviembre, 2013