Diciembre 26, 2024

Denuncian al Directorio de Codelco por estafa y fraude al Fisco

La ONG Recuperemos el Cobree Chile, que preside el economista Julián Alcayaga, presentó una denuncia ante el Consejo de Defensa del estado contra los directivos de Codelco por estafa y fraude al Fisco. Durante los últimos diez años en la empresa estatal se han venido produciendo pérdidas reiteradas e inexplicables por varios miles de millones de dólares, las que corresponderían a operaciones fraudulentas que han perjudicado al estado de Chile en beneficio de personas y grupos que el Consejo debiera investigar.

 

Las operaciones involucran a ejecutivos nombrados durante los gobiernos de la Concertación, así como a los del actual gobierno de Sebastián Piñera.

 

 

Sr.

Sergio Urrejola Monckeberg

Presidente

Consejo de Defensa del Estado

Estimado Sr. Presidente:

 

El Consejo de Defensa del Estado, según el Título primero de su Ley Orgánica, DFL N° 1, tiene por objeto principal la defensa judicial de los intereses del Estado, y en virtud de esas obligaciones, solicitamos que el Consejo de Defensa del Estado asuma la defensa del Estado, en la presente denuncia por estafa y fraude al Fisco, por efectos de operaciones y actuaciones del Directorio y plana ejecutiva de la Corporación Nacional del Cobre, en adelante Codelco, que le han generado pérdidas a la Corporación, y por ende al Fisco, por varios miles de millones de dólares.

          Estas pérdidas se han producido en dos tipos de operaciones y actuaciones, que involucran al Directorio y los máximos ejecutivos de la empresa en los últimos 10 años, y posiblemente de autoridades gubernamentales de los 3 últimos gobiernos. Las operaciones más antiguas, conciernen pérdidas en los mercados de futuro del cobre, y las más nuevas, conciernen las inexplicables caídas de los ingresos por venta de Codelco durante los ejercicios 2010, 2011, 2012 y primer semestre de 2013.  

1.- Perdidas en operaciones en Mercado de Futuro de Metales

          En 1993 y 1994, Juan Pablo Dávila perdió alrededor de 170 millones de dólares de Codelco, por lo cual fue condenado a penas de presidio. Es necesario tener presente que en la investigación de estos hechos, el Ministro Sr. José Benquis, logró recuperar 6.426.000 dólares de parte de “Minera El Bronce” de Paulino Noemí, y más de 30 millones de dólares de parte del broker Merryl Linch. Estas devoluciones, que se efectuaron previo acuerdo que Codelco no los persiguiera judicialmente, es un claro indicio que las pérdidas en estos mercados tienen un marcado estilo delictual.

 

Entre los años 2006 y 2012, en estos mismos mercados de derivados, Codelco perdió US$ 4.670 millones, pérdidas que son 27 veces superiores a las generadas por Juan Pablo Dávila en 1993-94, a pesar que desde esa fecha quedó prohibido que Codelco operara en dichos mercados.

 

A este respecto, adjuntamos  fotocopia del reportaje de La Tercera de septiembre de 2010[1], que acompañamos, en el cual el Sr. Andrés Tagle, miembro del Directorio de Codelco, sostiene que entre los años 2006 y 2009, es decir bajo gobiernos de la Concertación, existen perjuicios estimados para el Estado por 4.600 millones de dólares de pérdidas  en los mercados de derivados. Con posterioridad La Tercera no se refirió más a este tema, y El Mercurio o la televisión nunca dijeron una sola palabra sobre estas cuantiosísimas pérdidas, lo que resulta sospechoso visto que estas pérdidas son multimillonarias y constituyen un verdadero escándalo nacional. Desde ese reportaje de septiembre 2010, el Sr. Tagle no hizo más declaraciones públicas sobre estas pérdidas, como si ellas no hubieran existido.

Como nunca más se habló en los medios de estas pérdidas, llegamos a pensar que esas pérdidas no existían y que el Sr. Tagle, que había sido a la vez dirigente de la UDI, con estas denuncias solo perseguiría perjudicar políticamente a los gobiernos de la Concertación, porque sería bajo estos gobiernos que se habrían generado estas pérdidas. Posteriormente descubrimos que esas pérdidas eran absolutamente reales a raíz de los siguientes hechos. En marzo de 2011, el Sr. Diego Hernández, a la sazón Presidente Ejecutivo de Codelco, realizó una conferencia de prensa para presentar los resultados de la Corporación por el año 2010. El presentó estos resultados como un gran éxito de su gestión, al obtener excedentes por 5.799 millones de dólares, que superaban al ejercicio 2009 en 1.851 millones de dólares.

 

Al analizar los resultados del año 2010 con mayor detención, saltaba a la vista que estos excedentes de US$ 5.799 millones estaban lejos de ser un éxito, puesto que el año 2006, con un precio del cobre inferior en 12,1% al año 2010, arrojó excedentes por US$ 9.215 millones, un 37,1% superior al año 2010. Había una caída considerable e inexplicable de los resultados de Codelco por el año 2010, de alrededor de US$ 4 mil millones, por lo que concluimos que tal vez era cierto lo de las pérdidas en derivados que había hablado el Sr. Andrés Tagle. Como esta información no estaba disponible en ningún lado, nos vimos en la obligación de entrar a analizar detalladamente la Memoria de Codelco por  el ejercicio 2010. Descubrimos  que en las Notas Explicativas a los resultados, se daba cuenta de 1.042 millones de dólares de pérdidas en derivados el 2010. Como esta pérdida no explicaba la totalidad de la caída de los resultados de Codelco, decidimos analizar también las Memorias de años anteriores.

 

Del análisis de las Memorias de Codelco de los últimos 7 años, aparecen las siguientes pérdidas en las Notas Explicativas de los balances, punto C3 de las Memorias de la Corporación, notas que pueden ser resumidas en el siguiente cuadro:

C3= Operaciones para protección de flujos de caja respaldadas con producción futura (En miles de dólares).

  Resultados del        Resultados               Página en la

AÑO     Ejercicio                 Pendientes                  Memoria

2006     {   255.004}                        (2.971.649)                N°105 

2007     {   320.728}               (3.596.775)                   N°149

2008     {   679.550}               (   127.422)                   N°154

2009     {   416.138}               (2.775.695)                   N°182

2010     {1.005.680}                        (2.409.632)                    N°183

2011     {1.228.060}               (  722.000)                   Nº 82

2012     {   765.000}                                                  N° 275

Total    {4.670.160}

 

En la columna Resultados del Ejercicio se encuentran las pérdidas ya realizadas y pasadas a resultados “extracontablemente”, en disminución de los ingresos por ventas de cada año indicado, y que suman en total US$ 4.670 millones de pérdidas, ya registradas y pagadas entre los años 2006 y 2012. Los Resultados Pendientes son las provisiones por posibles pérdidas al cierre de cada uno de los ejercicios, que pueden convertirse en pérdidas efectivas en los siguientes ejercicios contables. En la cuarta columna se señalan los números de las páginas de las Notas Explicativas de los Resultados, en cada una de las Memorias de esos años, donde se da cuenta de esas pérdidas, pero que estas Notas Explicativas no las designan como pérdidas, sino como ingresos pero con cifras entre paréntesis.

Estos resultados demuestran que era cierto lo expresado en septiembre de 2010 por el Sr. Andrés Tagle, miembro del Directorio de Codelco. Pero era muy extraño que el Ministerio de Minería, Cochilco u otro organismo de este Gobierno y el anterior, nunca hayan dicho una sola palabra de estas colosales pérdidas, ni que tampoco se haya informado de ellas a la Superintendencia de Valores y Seguros, como un hecho esencial. En la presentación de los resultados del ejercicio 2010 por el Presidente Ejecutivo de la Corporación, Sr. Diego Hernández, tampoco dijo una sola palabra sobre esas cuantiosas pérdidas en derivados, y el auditor de la Corporación, Deloitte, tampoco nada dijo en su informe de auditoría.  Nos parece que el silencio de estos organismos es un tema a investigar, así como también lo es conocer las razones que obligaron al Sr. Andrés Tagle  a callarse posteriormente sobre estas multimillonarias pérdidas, después de haberlas denunciado.

 

En respuesta al diputado Sr. Carlos Montes, que se acompaña, la Comisión Chilena del Cobre, Cochilco, sostiene que todas las pérdidas contabilizadas hasta el año 2012, fueron generadas por operaciones realizadas entre los años 2005 y 2007, y que este tipo de operaciones que estaban prohibidas anteriormente, se reanudaron por Codelco el año 2003, pero no se dice quién o quienes autorizaron a operar nuevamente en estos mercados prohibidos. Este mismo informe de Cochilco, para justificar este tipo de pérdidas, sostiene que este tipo de operaciones, “son comunes a toda la industria Minera, son cotizadas y realizadas en el mercado financiero formal”, y se realizan para proteger los precios de las fluctuaciones del mercado y minimizar los riesgos financieros.

 

Parece una justificación muy razonable e inatacable, que mediante estas operaciones se intente proteger los flujos futuros de caja, pero en los hechos es un mero pretexto que cubre con un ropaje técnico o financiero, operaciones que no tienen otro objetivo que traspasar dolosamente ganancias a determinados operadores, como quedó demostrado en la investigación del Ministro Sr. Benquis en 1994. Que estas operaciones están destinadas a que ganen ciertos operadores de esto mercados, queda en evidencia en el siguiente cuadro, que corresponde a la lámina 11 de la presentación del Sr. Diego Hernández en la Comisión Investigadora de Codelco, de la Cámara de Diputados, al comentar nuestra presentación en esa misma Comisión, sobre estas cuantiosas pérdidas.

 

          En esta lámina se muestran las operaciones realizadas en derivados en los años 2005 y 2006, que produjeron US$ 1.042 millones de pérdidas con vencimiento el año 2010. Esta lámina del Sr. Diego Hernández, no hace sino confirmar que estas pérdidas no se produjeron “por equivocada apreciación del mercado”, sino que es una pérdida deliberada en favor de ciertos operadores de esto mercados.


 

 

 

          Tomemos sólo una sola de estas transacciones a manera de ejemplo, la suscrita en enero 2006 por la venta de 150.000 toneladas de Minera Gaby, que se negoció a US$ 136 centavos la libra, cuando en ese mes y año el precio del cobre superaba los US$ 220 centavos la libra, y que todos los estudios de la época apuntaban a que el precio del cobre continuaría subiendo, como efectivamente ocurrió. Me permito acompañar un estudio del año 2006 del Banco Central de Chile, de los economistas señores Patricio Jaramillo y Jorge Selaive, titulado “Actividad Especulativa y Precio del Cobre”, estudio en el cual precisamente se explica como había aumentado la actividad especulativa con el cobre, en razón que su precio continuaría al alza.  Recordemos que el año 2006 el precio promedio del cobre fue 3,05 dólares la libra, que subió a 3,23 el 2007, a 3,15 el 2008, bajó a 2,34 dólares el 2009 a causa de la crisis subprime, para volver a subir a 3,42 el 2010, a 3,99 dólares el 2011 y 3,66 el 2012.

No es lógico ni admisible sostener que se trata de una simple equivocación, de un error en el análisis del mercado, vender a futuro a 1,36 dólares la libra, cuando el precio del cobre triplicó dicho precio en los meses y años que siguieron. Eso no puede ser admitido como una equivocación. Nadie es tan ineficiente y poco profesional como para cometer ese tipo de errores. Esto no puede ser sino una pérdida deliberada de Codelco en beneficio de algún operador determinado. Todos los estudios de mercado pronosticaban precios muy superiores, a los que se negociaron los contrato que figuran en esta lámina del Sr. Diego Hernández, porque la oferta mundial de cobre estaba estancada, en razón que la producción chilena, que aportaba el 60% del comercio mundial de cobre de mina no crecía, que incluso había bajado el 2005 y 2006 en relación al 2004, mientras que la demanda china observaba un fuerte crecimiento, y por ello el precio del cobre no podía sino subir. Eso decían todos los estudios de mercado sobre el cobre.

Los miles de millones de dólares que se perdieron en estos mercados no se produjeron porque el Directorio y los directivos de Codelco eran inexpertos e ineficientes. Las pérdidas fueron proyectadas y planificadas deliberadamente, para que otros ganaran, de la misma manera que lo había hecho J.P. Dávila en el pasado. Es necesario investigar quienes son los que ganaron lo que Codelco perdió.

 

Pero la investigación sobre este tipo de pérdidas debiera extenderse a todas las grandes mineras, porque también han recurrido a este tipo de pérdidas para evadir impuestos en Chile. En el año 1994, Minera Mantos Blancos S.A. –hoy Anglo American Norte-,  perdió el 8 % de sus ventas, 14 millones de dólares, en los mercados de futuro, y en 1995 estas pérdidas alcanzaron los 48 millones de dólares, lo que equivalía al 25 % de sus ventas, que ese año fueron de 198 millones de dólares. Proporcionalmente era una pérdida  3 veces superior a la de Codelco, sin embargo los medios de comunicación nunca informaron sobre estas pérdidas y nunca lo hicieron posteriormente. El responsable de Mantos Blancos S.A. en esa época, y por tanto responsable de esas considerables pérdidas en los mercados de futuro fue precisamente el Sr. Diego Hernández, que fue Presidente Ejecutivo de Codelco durante desde abril 2010 a mayo 2012.

 

          Sin embargo, el Sr. Diego Hernández, responsable de estas colosales pérdidas en estos mercados, como Presidente de Mantos Blancos S.A., no fue denunciado por ello, tampoco fue despedido, por el contrario, fue ascendido por Anglo American a Presidente de Minera Collahuasi, y posteriormente ocupó puestos de mayor relevancia en mineras transnacionales y fue elegido Presidente del Consejo Minero. Esto confirma que las pérdidas en estos mercados no es por incapacidad a prever el comportamiento de los mercados, sino todo lo contrario, se pierde deliberadamente a favor de escogidos operadores de estos mercados, y esa es precisamente la razón por la que el FMI, desde hace más de 30 años viene recomendando a los países del Tercer Mundo legislar para declarar que dichas pérdidas son “gastos no necesarios para producir la renta”.

 

          El FMI postula estas medidas porque considera que las pérdidas en los mercados de futuro es una forma fraudulenta de traspasar utilidades entre empresas relacionadas, con el objetivo de hacer desaparecer las utilidades en las empresas filiales del Tercer Mundo. Eso fue lo que efectivamente ocurrió con Juan Pablo Dávila en 1994, al perder alrededor de 170 millones de dólares de Codelco, pérdidas que en parte comprobó y recuperó el Ministro Sr. José Benquis. Hoy esas pérdidas son 27 veces superiores a las de 1994, y no pueden quedar sin investigación por parte del Consejo de Defensa del Estado y los Tribunales de Justicia, para lo cual sugerimos los siguientes puntos a esa investigación.

1.- Fechas de cada Transacción, con el resultado económico  para Codelco desde el año 2005 a la fecha.

 

2.- Monto de cada Transacción en Dólares y en cantidad de Libras (toneladas) de Cobre y cuál era el Contrato de venta de futuro que la justificaba.

 

3.- Cuales son los acuerdos y que ejecutivos autorizaron cada Transacción.

 

4.- Comisiones que se pagaron. A quien o quienes.  Bancos y/o Autoridades que participaron Directa y/o Indirectamente en ellas.

 

5.- Quiénes fueron las CONTRAPARTES que adquirieron los Contratos vendidos por Codelco, y los Intermediarios, Brokers y/o empresas que participaron en la transacción.

 

6.- Verificaciones reales de que todas las personas y/o Empresas relacionadas con estas Operaciones, y que ninguna tenga o haya tenido relaciones de algún tipo con Directores o Ejecutivos de Codelco, o autoridades diversas.

 

 

2.- Pérdidas por menores ingresos por ventas, debido a probable subfacturación

 

          En razón que los resultados de Codelco por el ejercicio 2010 arrojaban que los ingresos por venta eran inferiores en alrededor de US$ 4.000 millones a lo que debieran ser, en función de la producción y precios alcanzados por el cobre y subproductos, y que los US$ 1.042 millones de menores ingresos en las ventas por pérdidas en derivados, estaba lejos de explicar la considerable baja de los ingresos por ventas, todo ello indicaba que se estaba produciendo una nueva fuente de pérdidas para Codelco, lo que se materializaba en una inexplicable caída de los ingresos por venta.

 

          Efectivamente, al analizar los ingresos por ventas  desde el 2010 al 2012, y compararlos con las ventas de ejercicios anteriores, sobretodo de los años 2006 y 2007, no había duda que los ingresos de Codelco estaban desapareciendo misteriosamente, como lo podemos verificar con la siguiente información sacada de las Memorias de Codelco por esos años.

 

 

Codelco Antecedentes relevantes (miles US$)

 

Año

2006

2007

2008

2009

2010

2011

2012

Producción

1676

1583

1466

1702

1689

1668

1602

Valor Cobre BML

3,05

3,23

3,15

2,34

3,42

3,99

3,66

Total Ventas

17077

16988

14425

12379

16066

17515

15860

Ventas cobre Prod*precio

11266

11269

10178

8778

12731

14668

12923

% ventas cobre

66,0

66,3

70,6

70,9

79,2

83,7

81,5

Costos de venta

7592

8373

9195

7484

9089

10283

10852

Costos finales

7862

8537

9455

8431

10267

10482

12133

Excedentes

9215

8451

4970

3948

5799

7033

3727

Ratio Exced/ventas

0,54

0,50

0,34

0,32

0,36

0,40

0,23

 

 

          Como se puede observar, las ventas totales por el ejercicio 2006 fueron de US$ 17.077 millones, y el 2010 fueron solamente de US$ 16.066 millones, US$ 1.011 millones menos, a pesar que este último año el precio del cobre fue 12,13% superior y se produjeron 23 mil toneladas más que el 2006. Considerando los aumentos de precio del cobre y sus subproductos, y los aumentos de producción, las ventas totales de Codelco por el ejercicio 2010 debieron ser alrededor de 20 mil millones de dólares, es decir 4 mil millones más de los que aparecen en el balance 2010. ¿Dónde están? ¿Quiénes han sido los favorecidos con esa subfacturación en 4 mil millones de dólares? No se trata de 4 millones, sino de cuatro mil millones de dólares, solo por el año 2010.

 

          Pero esta inexplicable caída de los ingresos por ventas continuaron el año 2011, puesto que los resultados de este año arrojan ventas por US$ 17.515 millones, es decir solo US$ 438 más que el 2006, a pesar que la producción creció en  3,5%, el precio del cobre en 33%, el oro y la plata en más de 2 veces y al ácido sulfúrico en 4 veces, solo el molibdeno tuvo un precio inferior. Nuevamente tenemos una inexplicable baja en los ingresos por ventas por el año 2011 sobre los 4 mil millones de dólares. Si recapitulamos, tenemos US$ 4 mil millones de menores ventas el 2010, otros 4 mil el 2011, y a lo menos 3 mil millones el 2012, y la misma cantidad el 2013, lo que suma en total US$ 14 mil millones de inexplicables de menores ventas, desde que asumió el nuevo directorio y plana ejecutiva de Codelco.

 

          El año 2006, los excedentes representaban el 54% de las ventas, mientras que el año 2010 los excedentes representan solo el 36% de las ventas, y solo 23% el 2012. No se puede decir que han existido errores, o contingencias no previstas, porque desde abril del 2010 Codelco es dirigido por un Directorio técnico y profesional, y sobretodo porque el Presidente Ejecutivo, los vicepresidentes y los gerentes son todos ejecutivos de “clase mundial” en la minería, que llegaron a la Corporación desde Anglo American y de otras transnacionales mineras para aumentar la rentabilidad de la empresa, pero en lugar de ello, los resultados de los años 2010, 2011, 2012 y 2013, son los peores de toda la historia de Codelco, teniendo en consideración la producción y el precio del cobre y sus subproductos.

          El Sr. Diego Hernández, trató de explicar los menores ingresos por ventas, en la Comisión Investigadora de Codelco de la Cámara de Diputados, por el aumento sustancial de los costos en general y de la energía en particular. Esa explicación no tiene ninguna relación con nuestro análisis, porque no estamos hablando de la caída de los excedentes o de los resultados de explotación, sino que exclusivamente de los ingresos, los cuales no dependen para nada de los costos o gastos sino solamente de la producción y los precios de los productos que vende Codelco. Es evidente que los excedentes de Codelco han caído considerablemente desde que la actual “administración de excelencia” dirige la Corporación, pero el aumento de los costos solo explica una pequeña parte de los malos resultados, la mayor parte se explica por las dolosas caídas de las ventas.

          Además, la razón de escoger los ingresos para este análisis, es que estos pueden ser calculados en forma más o menos aproximada, en base a la producción de cobre y subproductos multiplicados por sus respectivos precios, información que es pública, y cualquiera persona puede realizar los cálculos de los ingresos por venta, mientras que la información sobre los excedentes o resultados depende de los costos o gastos, que son secretos y nadie puede verificar su veracidad, salvo los auditores de Codelco.

 

          Es precisamente la información de los ingresos, la que deja en evidencia que estamos frente  una escandalosa defraudación de Codelco, por varios miles de millones de dólares. No existe ninguna razón válida para que exista una caída tan considerable de los ingresos de Codelco desde el año 2010 hasta ahora. Solo puede existir una razón para explicar esta importante y continua disminución de los ingresos: que el cobre y sus subproductos hayan sido exportados a precios muy inferiores a los del mercado internacional.

 

          Es aquí donde comienza a emerger el fraude, porque ni Codelco ni ninguna otra minera extranjera, pueden exportar a precios inferiores a los del mercado internacional, porque ello está prohibido por el art. 36 de la Ley de la Renta. Es decir, es ilegal exportar a precios inferiores al mercado internacional. A este respecto el N° 4 del art. 97 del Código Tributario establece que las declaraciones maliciosamente incompletas o falsas pueden ser castigadas con presidio menor en sus grados medios a máximo (de 541 días a tres años), y multas del cien al trescientos por ciento de lo defraudado. Exportar el cobre y sus subproductos a precios inferiores al mercado constituye también fraude aduanero, en aplicación de las letras a y b del art. 181 de la Ordenanza de Aduanas, lo que también se castiga con presidio en su grado mínimo a medio y multas de 5 veces del valor de lo defraudado. 

 

          Queda claro que exportar a precios inferiores al mercado es un delito.

 

          Pero la cosa puede ser aún más grave, porque no parece factible que la totalidad del cobre y subproductos hayan sido exportados a precios inferiores al mercado, y seguramente solo una parte de esas exportaciones se hicieron a menor precio a determinadas y escogidas empresas que estaban al corriente de estos precios de remate: ¿Cuáles empresas? Es aquí precisamente donde podría encontrarse el delito más grave, la asociación ilícita, porque no sería raro que empresas beneficiadas con estas rebajas de precio, pudieran ser filiales de las mismas transnacionales mineras para las cuales trabajaron los actuales altos ejecutivos de Codelco, entre ellas Anglo American, de donde proviene el actual Presidente Ejecutivo de Codelco Thomas Keller y Rodrigo Toro, Vicepresidente nada menos que de Comercialización. Además, dichas filiales, que ganaron lo que Codelco perdió, como es habitual en las transnacionales mineras, podrían estar  domiciliadas en paraísos fiscales, de manera a no pagar impuestos por estas ganancias extraordinarias producto de estas compras a Codelco a menor precio, y de esta manera estas ganancias libres de impuestos pueden servir para pagar suculentas “coimiciones”, a los que les permitieron comprar cobre y otros subproductos a precios de remate.

 

          La opinión pública desconoce totalmente estas cuantiosísimas pérdidas de Codelco, así como las pérdidas en los mercados de futuro, porque los medios de comunicación las han ocultado, sin embargo, estos medios, durante meses dedicaron miles de páginas y decenas de horas de televisión y radio, al litigio Codelco-Anglo American, noticia de muy menor importancia a las multimillonarias pérdidas que estamos denunciando.

 

          Ya hemos dicho, que presentamos una denuncia sobre estos dos tipos de pérdidas, ante la Comisión Investigadora de Codelco de la Cámara de Diputados, que funcionó entre julio 2011 y diciembre 2012, y a pesar que se dedicaron dos sesiones completas a esta denuncia, el Informe Final y Conclusiones de esta, sobre esta denuncia concluyó.

 

            “15.     La comisión concluye que, en virtud de las pérdidas generadas por las  negociaciones de “contratos futuros” en más de una ocasión, se hace necesario una revisión respecto de la utilización de este instrumento, de forma que no generen a futuro perjuicios a la compañía”.

 

            Respecto de los contratos de futuro es necesario una revisión, pero sin tomar ninguna decisión para ponerle término. ¿Y los US$ 4.670 millones que ya se han perdido? Nada, para los diputados de la República haya que olvidarse de esas pérdidas. Este informe, tanto en Comisión como en sala fue aprobado por unanimidad, con la sola y honrosa excepción del diputado Luis Lemus.

          En octubre de 2011, esta misma denuncia fue presentada al Director Nacional del Servicio de Impuesto Internos, y después de 2 años no tenemos ninguna información, respecto de si se han tomado medidas para iniciar una investigación.

 

          Por las razones expuestas, Sr. Presidente, esperamos que el Consejo de Defensa del Estado, en tanto órgano de defensa del patrimonio del Fisco, tomará definitivamente la resolución de investigar esta denuncia, que también haremos llegar a S.E. el Presidente de la República.

 

Saluda Atentamente a Ud.

 

Julián Alcayaga Olivares

Presidente

O.N.G. Recuperemos el

Cobre de Chile

 

 

 

 

 

 

Santiago, 28 de octubre 2013    

 

 

 

 

Se acompaña:

1.- Reportaje de La Tercera al Sr. Andrés Tagle

2.- Informe del Banco Central “Actividad especulativa y precio del cobre”, 2006.

3.- Respuesta de Cochilco a H. Diputado Carlos Montes, agosto 2011.

 

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