Después de cuatro gobiernos de la Concertación y de un gobierno de la Alianza hemos podido comprobar lo errado de la teoría del mal menor.
Seguimos con la misma Constitución de la dictadura y ninguna de las dos coaliciones está por cambiarla por una nueva generada a partir de un proceso y de una Asamblea Constituyente.
Ambas Coaliciones están por mantener el modelo de crecimiento liberal, más aún lo han profundizado a su grado máximo.
Ambas Coaliciones aplicaron injustificadamente la Ley Antiterrorista al pueblo mapuche.
Ambas Coaliciones han reprimido y siguen reprimiendo con brutalidad a los Movimientos Sociales y en particular al Movimiento Estudiantil.
Ambas Coaliciones están por mantener las Isapres y las AFPs.
Ambas Coaliciones están por mantener el cobre y los recursos naturales, incluido el agua y el mar, en manos de las trasnacionales y de los grupos económicos criollos.
Ambas Coaliciones están por el lucro en la educación preuniversitaria y son ambiguas sus posiciones frente a la educación gratuita desde los jardines infantiles hasta las universidades e institutos profesionales.
Ambas Coaliciones están por dejar a las ciudades y a quienes vivimos en ellas a merced de la industria inmobiliaria y de los especuladores del suelo.
Ambas Coaliciones son partidarias del transporte privado y de las mal llamadas autopistas urbanas que segregan y deterioran nuestras comunas y ciudades.
Ambas Coaliciones están por mantener desreguladas la banca, las farmacias y las grandes tiendas sin ningún control que ponga fin al abuso de que somos víctimas las chilenas y los chilenos.
Ambas Coaliciones no hacen nada por mejorar las condiciones de trabajo precario de millones de compatriotas ni por cambiar el Código Laboral.
Ambas Coaliciones quieren mantener la institucionalidad vigente y esperan que con cambios cosméticos podrán detener la fuerza de los Movimientos Sociales.
Ambas Coaliciones no están por una participación ciudadana real y vinculante desde el origen en todas las decisiones que nos afectan.
Ambas Coaliciones no son más que la derecha, la una salvaje y la otra al servicio de los intereses de las minorías que controlan nuestra economía.
Por ello digo no a ambas Coaliciones.
Por una Sociedad de Derechos que ponga fin al lucro y a la ganancia.
Por ello. a cambiar este modelo de crecimiento concentrador y regresivo por una Estrategia de Desarrollo que ponga al pueblo y a las grandes mayorías de nuestro país en el centro de su quehacer y su acción.
Por ello yo voto Marcel Claude
*Moisés Scherman es dirigente social de Ñuñoa y miembro de la Coordinación Nacional del Movimiento Amplio de Izquierda