Dos reconocidas tiendas del comercio nacional se encuentran en conflicto con sus trabajadores, producto del incumplimiento en el pago y por mezquinos aumentos de sueldos. La zapatería Bata, con presencia de tiendas en todo el país, se encuentra ene estos momentos en proceso de negociación del contrato colectivo con sus trabajadores, agrupados en su mayoría en el sindicato 1 de la empresa.
Sin embargo, hace unos días atrás, los trabajadores de las tiendas realizaron una manifestación a nivel nacional, donde paralizaron sus labores y marcharon (en Santiago realizaron una marcha desde Plaza Italia a Plaza de Armas), en protesta por el no pago de la gratificación legal que establece el Código del Trabajo, que año a año les corresponde y que, en esta oportunidad, la empresa se negó a pagar pese a registrar utilidades por $4.237 millones durante el año 2012, según consta en la memoria anual.
Los trabajadores acusan que el gerente de Recursos Humanos y Desarrollo de Bata, Cosme Vilches Canto, les argumentó al momento de anunciarles el no pago de la gratificación, que la empres tuvo “pérdidas líquidas tributarias” durante el año pasado.
Sin embargo, existen documentos que demuestran que Bata repartió $2725 millones entre la junta de accionistas y los ejecutivos, en abril y diciembre del 2012, además del pago de un royalty que paga la Bata a su familia en Suiza por un monto aproximado a $1.384 millones, pagos que no fueron informados a los trabajadores y que los ha llevado a tomar la determinación de iniciar movilizaciones.
En un comunicado público que dio a conocer el sindicato, los trabajadores de Bata afirman que no aceptarán que “mediante maniobras contables, se nos excluya de la gratificación legal, más aún cuando hay un grupo de trabajadores más antiguos, a los que se les ha pagado en forma garantizada. Nos manifestaremos en todas las formas posibles hasta que Bata Chile cumpla con su obligación de pagarnos gratificación”.
Juan Basaure, dirigente del sindicato 1, afirmó que los motivos por los cuales piensan en continuar con las movilizaciones durante estos días –dentro del proceso de negociación del contrato colectivo- es porque la empresa ha tomado medidas para presionar a sus trabajadores, no renovando contratos que culminan este mes y el próximo y cortando los canales de comunicación entre los trabajadores de las distintas tiendas del país. Agrega que “el 50% de los trabajadores gana el sueldo mínimo y el resto un poco más y, si cumplimos con metas de venta, se nos pagan 20 mil o 30 mil pesos más. Muchos trabajamos en malls, con horarios de 12 horas, sin comedores ni ninguna comodidad y la gratificación legal es muy importante para ellos y sus familias. Es por eso que hicimos la marcha hace unos días y pretendemos continuar con las movilizaciones porque sabemos que la negociación colectiva se nos viene muy dura”.
Ripley Antofagasta en huelga
Otra tienda que está en tela de juicio por mezquindades con sus trabajadores es Ripley, particularmente la tienda de la ciudad de Antofagasta, quienes estarían iniciando una huelga legar a contar de este viernes 31 de mayo.
Esto, debido a que en el proceso de negociación colectiva con los trabajadores de dicha ciudad, la empresa propone un aumento de sueldo real de $5000, incluidos movilización y colación, además de pretender que dicho acuerde perdure por tres años.
Mediante un comunicado público, la Federación de Sindicatos Ripley (Feser), la cual integran 16 sindicatos de tiendas a nivel nacional, los sindicatos de call center y cobranzas Pay Back, Seguros Ripley y Banco Ripley, los que totalizan 20 sindicatos con un universo de 3.473 trabajadoras y trabajadores, expresaron su más enérgico malestar por la poca seriedad de la empresa para con sus trabajadores.
“La empresa Ripley, ha sido mezquina e inconsecuente al no entregar aumentos de sueldos a los trabajadores de Antofagasta, entregando una mísera propuesta equivalente a un promedio de $5.000 por personas de aumento real y beneficios eventuales o esporádicos y por un periodo de vigencia de tres años, a pesar de las grandes utilidades que ha informado Ripley Corp quien entrego sus resultados financieros del primer trimestre a través de la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) alcanzando utilidades por $5.964 millones, es decir, un 6,7% más respecto de igual periodo del año 2012. Si se descuenta la actividad de Colombia las ganancias habrían mostrado un aumento de 47% a marzo de 2013, además los ingresos totales del retail crecieron un 3,8% durante el primer trimestre, mientras que el Ebitda alcanzo los $16.922 millones, aumentando un 6,7% comparado con el trimestre del año anterior”, señala el comunicado.
El texto agrega además que “bajo los supuestos de aumentos de beneficios la empresa engaña a sus propias trabajadoras y trabajadores y además a la opinión publica, al decir, que entrega beneficios reales y concretos a sus trabajadoras y trabajadores”.
Finalmente, hacen un llamado a los representantes de la empresa “a tener la voluntad de distribuir mejor las utilidades que ha logrado obtener en el periodo comercial del año 2012 y con el esfuerzo y sacrificio de todas las trabajadoras y los trabajadores”.
Esta situación podría agravarse si es que la empresa resuelve de la misma manera las negociaciones colectivas de sus tiendas en La Serena y en el Mall del Centro, en Santiago, lo cual podría desencadenar en una serie de huelgas en caso de no ceder a lo que exigen sus trabajadores mediante sus sindicatos.