Camilo Escalona, profesional de la política, no se le conoce otra, ante la difusa y oportunista propuesta de la candidata Bachelet de cambios constitucionales ha señalado “hemos propuesto un mecanismo concreto, que se forme una comisión bicameral, con el propósito de iniciar el trabajo hacia una nueva Constitución, ese es un trabajo largo, demora años, así es que lo mejor, es que tengamos mayoría en ambas cámaras y ahí podemos avanzar”.
La propuesta de Escalona busca dar largas al asunto, “demora años” señala este político profesional, a fin que el tiempo que todo lo diluye se haga cargo de esta demanda popular y que por cansancio la ciudadanía ponga en el estante de los imposibles esta necesidad cardinal de nuestra democracia.
Una nueva constitución es una necesidad de la democracia que debe expresarse en:
1.- El fin del sistema binominal para que la voluntad de los ciudadanos se refleje plenamente en la composición del Congreso, hoy lo determinante para ser parlamentario no es la voluntad del pueblo sino la de la camarilla del duopolio concertación-derecha.
2.- Que los quórum legislativos señalen que la voluntad de la mayoría pueda imponerse a la minoría y no al revés como lo deja establecido impúdicamente el artículo 66. No basta en la actual constitución la mayoría para dictar las leyes importantes estas pueden vetarse por una minoría.
3.- Hay que desmantelar la concepción de estado subsidiario, que plantea que esto sólo puede hacer lo que las personas no puedan, no quieran o no deban.
Los ciudadanos tienen derecho a salud, educación, previsión social y trabajo eso es un estado social de derecho, un estado solidario.
El estado subsidiario impuesto por Pinochet es un estado que reparte represión y limosnas entre sus ciudadanos y que hace de las necesidades sociales una oportunidad de negocios para los grupos económicos, eso debe terminar.
4.- Los cargos públicos son para servir a la patria no para enriquecerse a costa de ellos como lo ha hecho el Sr Escalona que siendo presidente del senado ganaba 62 mil dólares mensuales, mas que el rey Juan Carlos de España.
5.- Debe haber control ciudadano sobre todas sus autoridades mediante la revocabilidad y la elegibilidad democrática, y no por la propia camarilla de la clase política (gobierno-Senado), del Fiscal Nacional y los miembros de la Corte Suprema.
Una nueva constitución es para poner fin a los abusos en Chile que hacen que la medicina sea más cara que en Alemania, que el Metro cueste 4 veces mas caro que en Buenos Aires, que los ex presidentes “ganen” entre 13 y 15 millones de por vida incluidos 2 millones para viajes etc… Es una nueva Constitución para restablecer plenamente la democracia, la solidaridad y la justicia social, es por ende un nuevo pacto social no de la clase política corrupta sino un pacto ciudadano para poner fin a los abusos de la clase política y las grandes empresas que han hecho de Chile el país de la injusticia. Se trata de devolver Chile a los chilenos.
No podemos aceptar entonces, en caso alguno, una comisión bicameral, esto sería como decirle a los moradores de Santiago 1 que redacten ellos el nuevo Código Penal.
Un constitución realmente democrática y legitima en sus formas y contenidos sólo puede nacer de una Asamblea Constituyente establecida por mandatarios elegidos por la ciudadanía quienes elaboren un proyecto que luego debe ser plebiscitado.
Toda otra alternativa es un fraude en contra de la democracia.
ROBERTO AVILA TOLEDO