Ayer al mediodía, los trabajadores del sindicato de la Fundación Pablo Neruda, que cumplieron su quinto día de huelga, marcharon desde la casa museo La Chascona, hasta la sede capitalina del Consejo de la Cultura y las Artes, ubicado en el Paseo Ahumada, para exigir la intervención del ministro de la cartera, Luciano Cruz-Coke, y de esta manera lograr acercamientos con el directorio de la Fundación.
Los cerca de 30 trabajadores de las tres casas museo que administra la Fundación Neruda y que desde el lunes se encuentran en huelga legal exigiendo el aumento de los bonos de alimentación y locomoción, marcharon por el centro de la ciudad y llegaron hasta el edificio ministerial, en donde los estaba esperando la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, quien les entregó un mensaje de apoyo y solidaridad y los acompañó hasta el despacho de Cruz-Coke para hacer entrega de la carta.
La presidenta de la Central afirmó que es muy necesario el pronunciamiento por parte del ministerio en este conflicto, ya que las casas museo de Pablo Neruda son un importante aporte a la cultura del país y una de las caras más representativas de Chile para los turistas: “y es tremendamente injusto que los trabajadores de una de las principales fundaciones culturales de nuestro país, tengan que estar en huelga porque no les quieren aumentar los bonos de locomoción y movilización, cosas que son básicas y que bajo ninguna circunstancia deben ser negados por el empleador”, sostuvo la líder sindical.