Desde su creación en 2004, la Asociación Española para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos (AEDIDH), hoy integrada por 109 personas expertas en DIDH de España y América Latina, decidió establecer puentes de comunicación entre el mundo académico, las instituciones públicas y la sociedad civil, a fin de contribuir a la construcción de la paz a través del derecho.
En el plano internacional, esto supuso abogar por el reconocimiento de la paz como derecho humano. A esos fines, la AEDIDH condujo una Campaña mundial a favor del derecho humano a la paz, que tuvo como punto de partida la aprobación de la Declaración de Luarca sobre el Derecho Humano a la Paz en 2006. Durante cuatro años (2007-2010) la Declaración de Luarca fue consultada con personas expertas de todas las regiones del mundo y sometida a la consideración del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, instando a sus Estados miembros a iniciar la codificación oficial del emergente derecho humano a la paz.2 En 2010 el Consejo e Derechos Humanos encargó a su Comité Asesor la redacción de una declaración sobre el derecho de los pueblos a la paz. Paralelamente, la sociedad civil terminó su codificación «privada» con la aprobación el 10 de diciembre de 2010 de la Declaración de Santiago sobre el Derecho Humano a la Paz y de los estatutos del Observatorio Internacional del Derecho Humano a la Paz (OIDHP)
*Asociación Española para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos
** Carlos Villán Durán, Presidente de la Asociación Española para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos