Diciembre 26, 2024

Se viene una semana muy dura

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huelga-3Magdalena Rosas vuelve a escribir desde Aysén. Porque las cosas han empeorado en la región y en el país. Se viene esta semana muy dura: Marchas por el sueldo mínimo, los pescadores en alerta extrema,  la maldita Ley Hinzpeter que quiere criminalizar la manifestación social y el pescador José Asencio que continuará su huelga de hambre. ¡Por algo le dicen el Rambo! seguirá hasta morir, ya no tiene nada más que perder.

 

 

Los  pescadores de Aysén, con su maravillosa y entretenida forma  de contar  historias y sentimientos,  me llevan a la adolescencia en la Caleta de Horcón.


En esa época, Horcón todavía no era un lugar de moda. Era una caleta donde compartimos las ilusiones adolescentes con los pescadores que soñaban en en mar, en la pesca, en la misma vida, pero mas amable. Comíamos Locos enormes que ya no existen, Congrio frito, comenzábamos a probar el vino, creíamos que la vida nos pertenecería siempre;  en los cambios que venían; comenzábamos a soñar  que otro país era posible.


Hoy es domingo 15 de julio.


El sol  de la mañana fue derritiendo el hielo a poco, ahora en la noche todo se vuelve a congelar.


En este momento tenemos cinco  grados, un grado más que a las diez de la mañana.


Como no quisiera ser parte de esos mensajes que se ven llegar a la bandeja de entrada y se botan sin leer,  he estado sin escribirles.


Me perdonan, pero si siento que no tengo nada que decir, prefiero guardar silencio.


Hoy José Asencio, “El Rambo”, pescador artesanal de Puerto Gaviota, caleta pesquera ubicada en la zona litoral de Aysen, cumple su cuarto día en huelga de hambre en la Catedral de Coyhaique.


Se veía venir y ahora llegó: El martes continúa la votación en la Cámara de Diputados, de un proyecto de ley que reemplazará  a la Ley que vence en diciembre. En este nuevo proyecto, los pescadores artesanales  dicen no haber sido escuchados en temas fundamentales para ellos como son las cuotas de pesca,  la pesca de arrastre, las millas marinas destinadas a la pesca artesanal.


Marchas y movimiento en todo Chile.


Los recursos del mar han disminuido pero todos sabemos que el consumo nacional no ha aumentado.


¿Quien se ha enriquecido con estos recursos? ¿Para que han sido utilizados?


José Asencio,  con una bronquitis desatada, decide dejar de comer cualquier cosa sólida.


Ha adelgazado en estos cuatro días, se ve débil y cansado.


Yo no soy experta, pero llevo años escuchándolos: Los industriales han depredado el mar con  redes de arrastre. Sacan lo que les sirve y lo otro lo botan. Los pescadores de Aysén defendiendo sus cuotas, su territorio pesquero.


Ayer José Asencio le decía al senador Horwath que lo fue a saludar: Antes en el tarro de sardina usted encontraba un pedazo de sardina. Hoy encuentra cuatro o cinco sardinas chicas, porque ya no quedan.  El senador se comprometió con José, de que cuando el proyecto pase al senado,  va a venir a la región con la comisión de pesca a trabajar la Ley.


Siete familias que se convierten en Cuatro  consorcios  que  se quedan con el  93% del mar, dicen los pescadores. Las cinco millas marinas se reducen a una. Con las cuotas que cada pescador tiene hoy, no alcanza para vivir.


El Ministro Longueira después de la última sesión en la Comisión Pesca de la Cámara de Diputados que duró mas de dieciséis horas, se dedicó a la prensa, presentándose en todos los medios y poniendose el parche en la herida, porque si el martes la ley se vota así como está, los pescadores artesanales de Chile,  van a levantar  la voz.


La sensación que expresan los pescadores artesanales es que esta Ley esta hecha a la medida de los empresarios y que ello significa su muerte.


Atentos al martes.


Ahí veremos quien es quien en esta larga historia que se arrastra desde que Longeira asumió el Ministerio de economía y cambió las  reglas de las conversaciones que el sector  había tenido con Fontaine, el anterior Ministro.


Por otra parte, anoche a las nueve de  la noche en Coyhaique, la contaminación producto de las estufas de leña era de 995 partículas por metro cúbico , tres veces mas que el nivel crítico. El aire en ciertos sectores de la ciudad,  completamente irrespirable. La gente está dentro de sus casas , duerme, vive, se enferma, muere. No tengo cifras de cuantas personas han muerto como consecuencia de la contaminación en nuestra ciudad.


Les escribo porque siento que por allá , detrás de esta pantalla hay personas que se ocupan de lo que les preocupa.


Quisiera compartir con ustedes este sentimiento de dificultad: Escuchamos noticias aberrantes de situaciones de extrema locura, pienso en los degollamientos de un joven en manos de su amigo y su novia, de una mujer en manos de un anticuario desquiciado.


Las discusiones parlamentarias que nos dejan una fuerte sensación de abandono, rabia,  impotencia.


No sé si les pasa lo mismo, o solo me pasa a mí.


Quisiera compartir este pensamiento buscando una formula para transformar esta energía.


Se viene esta semana muy dura: Marchas por el sueldo mínimo, los pescadores en alerta extrema,  la maldita Ley Hinzpeter que quiere criminalizar la manifestación social y José que continuará su huelga de hambre. ¡Por algo le dicen el Rambo! seguirá hasta morir, ya no tiene nada mas que perder.


Estamos viviendo momentos de mucho individualismo, donde cada uno se salva a sí mismo sin mirar para el lado, las penas se ahogan en un casino, seguimos sin ser capaces de llevar adelante un proyecto común de cambio real.


Mandan los egos, las cuentas pendientes, los descréditos, mientras los vivos de siempre se aprovechan.


Por suerte existe la posibilidad de compartir este sentimiento con ustedes allá.


Por suerte también existe la música,  porque cuando veo a un niño de nueve años tocar maravillosamente una guitarra o  un violín y recuerdo la primera vez que llegó con su instrumento sin saber nada, me maravillo en las posibilidades humanas  y recupero la esperanza de que todavía hay cambios que son posibles.


Todo el cariño en estos días difíciles,

Magdalena

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