México DF.- En entrevista con Clarín.cl Eduardo Hurtado (1950), poeta y periodista cultural mexicano, habla del Movimiento Yo Soy 132: “Empieza por ser un movimiento reactivo -contra el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto-, encabezado por estudiantes de una universidad privada del país; luego, ante el empuje solidario de diversas universidades, se transforma en un movimiento capaz de articular diversas propuestas: democratización de los medios electrónicos; reducción de los muy onerosos, en realidad obscenos gastos de las campañas políticas; apertura de los partidos a la participación ciudadana, que incluya el análisis y consideración de las propuestas surgidas de la sociedad, y un largo etcétera”.
Autor de: Donde conversan los amigos; Ludibrios y nostalgias; Sol de nadie; Ciudad sin puertas; Las diez mil cosas; y Casi nada; entre otros libros de poesía. Fue jefe de producción de la revista Vuelta y editor en jefe de La Jornada Semanal. En la actualidad escribe notas de corte político en Pulso Ciudadano y twitter.
El poeta y periodista anticipa el sentido de su voto para las próximas elecciones presidenciales: “Después de muchas dudas, mi voto ya lo tengo claro: será por Andrés Manuel López Obrador, no porque me parezca un candidato óptimo -no los hay ahora en México, como no suele haberlos en ningún lado-, sino porque me parece el mejor armado para gobernar al país en estos momentos de zozobra. Su propuesta a favor de un gobierno que se ocupe en primer término de los pobres me parece muy digna y muy necesaria. No saldremos de la espiral de violencia que envuelve al país si no empezamos por combatir a fondo y con seriedad la pobreza”.
MC.- Eduardo, ¿qué papel juegan los poetas, intelectuales, artistas y actores frente a las elecciones presidenciales en México?, ¿están acompañando a los estudiantes?
EH.- En México, de cara a la elección presidencial, los intelectuales y los artistas juegan papeles muy diversos y hasta encontrados: los hay “orgánicos” del poder en turno que juegan a favor del candidato puntero en las encuestas; los hay incondicionales del candidato de la izquierda; existen también los que desde una posición muy reflexiva se empeñan en criticar y denunciar la candidatura de Peña Nieto, diseñada, construida y divulgada a lo largo de cinco años por una de las dos únicas cadenas televisivas del país: Televisa.
Entre estos últimos, más allá de la vocación compartida que los une -el rechazo a un candidato mediático-, hay posiciones distintas: apartidistas, adeptos al voto nulo, y los que se inclinan simplemente por hacer valer el derecho a votar, así sea por el menos malo. Este grupo final es el que ahora se ha sumado al movimiento que iniciaron los estudiantes de distintas universidades y que ha dejado de ser sólo estudiantil para convertirse en movimiento popular.
MC.- ¿Cómo explicarías –a lectores en Latinoamérica- el surgimiento del Movimiento Yo soy 132?
EH.- El 132 empieza por ser un movimiento reactivo -contra el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto-, encabezado por estudiantes de una universidad privada del país; luego, ante el empuje solidario de diversas universidades, se transforma en un movimiento capaz de articular diversas propuestas: democratización de los medios electrónicos -es decir, una política de Estado que abra las puertas a y fomente el surgimiento de nuevos canales de televisión, capaces de competir, mediante nuevas propuestas, con las dos cadenas de televisión existentes-; reducción de los muy onerosos, en realidad obscenos gastos de las campañas políticas; apertura de los partidos a la participación ciudadana, que incluya el análisis y consideración de las propuestas surgidas de la sociedad; la organización de un debate más -tres en lugar de dos- entre los cuatro aspirantes a la presidencia de la República, y un largo etcétera.
MC.- ¿El Movimiento Yo soy 132 irrumpió en las encuestas e inclinó la tendencia del voto entre sectores no estudiantiles?
EH.- Los triunfos más importantes alcanzados por el movimiento, ampliado ya con la participación de diversos sectores sociales, son dos: el compromiso, por parte de las dos cadenas de televisión mencionadas, de transmitir el segundo debate por sus canales de alcance nacional -el primero no tuvo esta cobertura-, y un segundo relacionado con tu pregunta: el descenso significativo en la encuestas de Peña Nieto y el consecuente y notable crecimiento del candidato de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador.
MC.- ¿Habría un parteaguas en la cobertura mediática de las elecciones después del Movimiento Yo Soy 132?
EH.- El parteaguas ya ocurrió: por un lado, las televisoras se han percatado de que ya no es posible engañar impunemente a los ciudadanos, mediante el apoyo no declarado al político que mejor representa sus particulares intereses; por otro lado, ante la difusión incontrolable y masiva de las denuncias ciudadanas a través de Internet, esas mismas televisoras se han visto obligadas a disimular su parcialidad a la hora de informar sobre las propuestas de los distintos aspirantes.
MC.- ¿Qué tipo de experiencias has vivido en las marchas Anti Peña Nieto?
EH.- Las marchas han estado marcadas por un notable despliegue imaginativo: los participantes dicen canciones, improvisan bailes y consignas, despliegan pancartas inteligentes y divertidas. En suma: las manifestaciones se han convertido en un gran espacio de libertad y, al mismo tiempo, de creatividad, es decir, en una verdadera fiesta.
MC.- ¿Cuándo está programada la próxima protesta?, ¿qué consigna llevarán?
EH.- La próxima marcha, de alcance nacional, será el domingo 11 de junio. Se ha decidido que la consigna central siga siendo el rechazo a la confabulación Televisa-Peña Nieto, ahora confirmada por el diario británico The Guardian y, en México, por las revistas Proceso y Sin embargo.
MC.- ¿Tus compañeros poetas de Latinoamérica te preguntan sobre la Primavera mexicana?
EH.- Me preguntan mucho los amigos poetas de otros países. Les digo que hacía mucho tiempo no germinaba en nuestro país un movimiento ciudadano tan espontáneo, tan nutrido y, cosa muy importante, tan a favor de una causa justa.
MC.- El año pasado coordinaste una Carta abierta en solidaridad con Javier Sicilia, ¿qué lectura hiciste de la reciente Mesa de Diálogo entre el Movimiento por la Paz y los candidatos presidenciales?
EH.- Javier Sicilia, amigo muy querido, colega respetado, ha emprendido una lucha que cada vez se centra más en el tema de la reivindicación de las víctimas. Tuvo mucha razón al echarles en cara a todos los candidatos, sin distingos de ninguna especie, que no se ocupen en sus campañas de este asunto, tan urgente, tan doloroso.
MC.- Finalmente, sé que el voto es libre y secreto, pero ¿cometerías la indiscreción de decirnos por quién votarás?
EH.- Después de muchas dudas, mi voto ya lo tengo claro: será por Andrés Manuel López Obrador, no porque me parezca un candidato óptimo -no los hay ahora en México, como no suele haberlos en ningún lado-, sino porque me parece el mejor armado para gobernar al país en estos momentos de zozobra. Su propuesta a favor de un gobierno que se ocupe en primer término de los pobres me parece muy digna y muy necesaria. No saldremos de la espiral de violencia que envuelve al país si no empezamos por combatir a fondo y con seriedad la pobreza.