El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció el miércoles la nacionalización de la industria del oro mediante una nueva ley que firmará próximamente con el objetivo de incorporar la producción aurífera a las reservas internacionales de la nación.
El anuncio de Chávez se produce en momentos en los que el oro alcanza niveles históricamente altos, superando los 1.700 dólares (1.176 euros) por onza, como consecuencia de la crisis de la deuda en Estados Unidos y ante los temores una recesión mundial. Según el mandatario, en la zona sur del río Orinoco (sur de Venezuela) existe “una de las reservas de oro más grandes del mundo”, además de importantes yacimientos de piedras preciosas, coltan, diamantes, bauxita y hierro.
“Vamos a nacionalizar el oro y vamos a convertirlo entre otras cosas en reservas internacionales porque el oro sigue incrementado su valor (…) y no podemos permitir que se lo sigan llevando“, expresó el mandatario venezolano en declaraciones telefónicas a la cadena estatal VTV.
Las reservas internacionales de Venezuela superaban a comienzos de agosto los 29.000 millones de dólares (20.067 millones de euros), de los que el 63% están en oro, según un informe del Banco Central de Venezuela. Las reservas internacionales colocadas en oro han incrementado un 35%, al pasar de 13.297 millones de dólares (9.202 millones de euros) a 17.914 millones de dólares (12.398 millones de euros), según informa el diario local ‘El Universal’.
En cambio el petróleo, la principal fuente de ingresos de Venezuela, no ha tenido la misma suerte y las reservas internacionales derivadas de sus ganancias no han crecido en lo que va de año, por el contrario, registran una caída de 2,5%, precisa el rotativo.
La nacionalización de la industria aurífera será posible gracias a que el Parlamento concedió a Chávez a finales del año pasado plenos poderes para legislar en materias claves como la economía -mediante una Ley Habilitante- sin tener que someter a consideración de los diputados este tipo de propuestas. El decreto que será emitido “pronto” establece que quedarán reservadas para el Estado “las actividades de exploración y explotación del oro y todas las actividades conexas”, ha explicado el líder socialista.
Chávez ha pedido a las Fuerzas Armadas su apoyo para poder llevar a cabo este proceso en la “zona del oro”, donde hay “anarquía, mafias y contrabando”. “Eso es una riqueza, una de las más grandes del mundo”, ha insistido.
Traslado de resservas
El diputado opositor Julio Montoya había denunciado el martes la supuesta intención del Gobierno de Chávez de repatriar las reservas de oro custodiadas por entidades en el exterior, así como su interés en retirar los fondos internacionales de los bancos extranjeros.
De acuerdo a las cifras divulgadas por Montoya, Venezuela tiene colocadas en el extranjero 211,35 toneladas de oro, equivalentes a 11.058 millones de dólares (7.660 millones de euros). Esa cantidad representa el 57,8% del total que posee esa nación sudamericana. Según denunció en rueda de prensa, el Gobierno estudia transferir el 90% de ese oro para guardarlo en las bóvedas del Banco Central de Venezuela, proceso que se culminaría en octubre.
En lo que se refiere a las reservas internacionales, la idea de repatriar esos fondos habría sido sugerida por China, que teme que un gobierno sin Chávez provoque serios problemas en el momento de cobrar los créditos otorgados a Venezuela.
Las reservas monetarias de Venezuela -29.000 millones de dólares (20.067 millones de euros)- están depositadas en Reino Unido (17,90%), Panamá (0,67%), Estados Unidos (11,31%), Alemania (0,68%), Francia (6,48%) y Suiza (59,17%). Montoya aseguró que el objetivo es colocar ese dinero en los bancos de los principales socios comerciales de Caracas, es decir, China, Rusia y Brasil.