Noviembre 28, 2024

A 38 años del asesinato del camarógrafo argentino Leonardo Henrichsen

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henrichsenbustamanteEsta semana se cumplieron 38 años del asesinato en Chile del camarógrafo argentino Leonardo Henrichsen, muerto en las calles de Santiago en un fallido levantamiento militar contra Salvador Allende, el 29 de junio de 1973.

 

 

 

 

Con motivo del aniversario, la editorial “Aún Creemos en los Sueños”, que publica la revista Le Monde Diplomatique Chile, puso a la venta en los kioscos del país la versión DVD del documental en 35 mm Imagen Final, del director argentino Andrés Habegger, que rescata la vida, trabajo profesional y muerte del camarógrafo argentino que registró en su cámara a los militares que le quitaron la vida.

 

Trabajando para el noticiario de cine “Sucesos Argentinos” y más tarde para la Radio y TV Suecia, la cámara de Henrichsen capturó imágenes inéditas de importantes conmociones sociales y políticas en diferentes países de la convulsionada América Latina de los años 60. Fue asesinado 74 días antes del golpe militar encabezado por Augusto Pinochet, mientras filmaba un olvidado y fallido alzamiento castrense que pasó a la pequeña historia como “El Tanquetazo”, porque el protagonista principal del atentado al orden constitucional fue el regimiento de tanques Blindados N° 2, que en esos tiempos tenia su sede a unas 15 cuadras del palacio presidencial de La Moneda.

 

La asonada, que fue frustrada por la decidida y valiente actuación del general Carlos Prats González -antecesor de Pinochet como comandante en jefe del Ejército y leal al Presidente Allende- fue digitada por la organización armada de extrema derecha “Patria y Libertad”, conducida en esos años por el abogado Pablo Rodríguez Grez, quien a partir de 1998 se convirtió en el más activo defensor de Pinochet ante los tribunales chilenos en numerosos juicios por crímenes que se litigaron hasta su muerte por infarto en diciembre de 2006.

 

(El general Prats fue asesinado en su exilio en Buenos Aires el 30 de septiembre de 1974 por el estadounidense Michael Townley, el mismo agente DINA que, junto a un equipo de terroristas de origen cubano protegidos hasta hoy por la CIA en EEUU, dio muerte en Washington al ex canciller y ex ministro de Defensa de Allende Orlando Letelier, el 21 de septiembre de 1976. Los asesinatos fuera de la frontera chilena fueron ordenados por Pinochet y planificados por el jefe de la DINA Manuel Contreras Valdebenito, ex general que cumple presidio perpetuo y otras condenas adicionales por múltiples crímenes).

 

Cuando le dieron muerte, Henrichsen registraba en su cámara el desplazamiento de los tanques en las proximidades de La Moneda, trabajando para la Radio-TV Suecia junto al corresponsal Jan Sanquist. Una patrulla, al mando del cabo segundo Héctor Hernán Bustamante Gómez lo asesinó frente al Banco Central, en la esquina de Agustinas y Morandé. En un hecho inédito en la historia del periodismo mundial, el periodista registró en su cámara de 16 mm la imagen de Bustamante Gómez cuando le disparaba con su pistola, así como a los conscriptos que también gatillaron fusiles de grueso calibre.

 

Paradójicamente, y a pesar de las imágenes profusamente difundidas del asesino principal,  la identidad de Bustamante logró ser conocida más de 30 años después del homicidio. La justicia chilena desestimó el crimen de lesa humanidad por haber ocurrido antes del golpe militar del 11 de septiembre de 1973. La jueza Rommy Rutheford, del segundo juzgado del crimen de Santiago, falló en 2006 que el homicidio había prescrito. Tampoco prosperó un recurso ante la corte superior. Para la justicia chilena, Herichsen fue una víctima de derechos humanos de segunda clase.

 

En 2007, la Corte de Apelaciones de Santiago encomendó al ministro Jorge Zepeda Arancibia investigar los asesinatos de Henrichsen y la suerte de otros tres ciudadanos argentinos desaparecidos tras el golpe (Oscar Héctor Bugallo Celuzi, Miguel Ángel Lacorte y Héctor Garzán Morillo), diligencia judicial que teóricamente aún seguiría su curso.

 

Bustamente pudo morir tranquilamente el 18 de diciembre de 2007, en una cama del Hospital Militar y en la más absoluta impunidad –curiosamente, al igual que Pinochet-, por neumonía asociada a cáncer pulmonar. Durante el fallido intento de golpe fue uno de los pocos miliares golpistas que resultó herido cuando huyó de la escena del crimen tras el fracaso de la asonada y fue conducido al mismo Hospital Militar, del que siguió siendo usuario hasta el fin de sus días.

 

El cinematografista argentino Andrés Habegger recreó la vida, pasión por su trabajo y muerte de Henrichsen en el documental Imagen Final, que -entre otros laureles cinematográficos- en 2010 obtuvo el gran premio del festival internacional de la cadena árabe de TV Al Jazeera, en Qatar. El film de 35 mm, estrenado en varias salas de cine de Buenos Aires en 2009, aún no se exhibe en Chile en “pantalla grande”.

 

 

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